En esta tercera parte nos encontramos con algunos actores nuevos y algunas bajas importantes; en el lado de las altas encontramos a Al Pacino y a Ellen Barkin, mientras que en de las bajas están: Catherine Zeta-Jones y Julia Roberts. Explicado esto vamos a desgranar lo bueno y lo malo de la película: entre las buenas está la vuelta de los chicos a Las Vegas, una gran puesta en escena: localización, decorados, vestuario, música pero también hay cosas malas. No es que el guión sea malo, el problema radica en como si algunas de las ideas de los anteriores films se hubieran agotado al llegar a ésta lo que puede llegar a provocar que en algunas fases del film esté de señales de decaimiento.
A pesar de lo todo lo comentado anteriormente, se trata de un producto muy digno en el que brilla el trabajo de los actores secundarios y una dirección más que correcta.