Una actriz de un único gesto, de expresión estreñida manifiestamente incapaz de transmitir ninguna emoción creíble de la danza y un director contando, mal, una historia contada con mucho más acierto en otras creaciones, de otros autores. Película absolutamente prescindible con una ristra de incomprensibles (?) nominaciones a los Oscar.

Me temo que he visto otra película, distinta a la que han visto muchos críticos y otros muchos espectadores, pero para mí es otro globo inflado a tope, a golpe de promoción y otra película incomprensiblemente vendida como excepcional y, por ello, candidata a varios Oscar. La interpretación (?) de George Clooney es lamentable; si esta película fuera su tarjeta de presentación sacaríamos la conclusión de que es un mal actor.
La onda afectivo-sensiblera en que se trata la película parece, como mínimo en Europa, extraña y todo el artificio carece de credibilidad. Con Hawai, sin Hawai; relaciones, sin relación; personajes en el aire con escasa definición, sin carácter, con una tensión dramática más bien mórbida, con exceso de minutos para lo que cuenta y unos diálogos que no pasarán a la historia. En fin, que -sintiéndolo mucho- me parece que está muy lejos de ser acreedora de tantas alharacas. Lo de los Oscar, es lo de menos; es accesorio y ya sabemos cómo va.

Sólo un plan de marketing digno de un estudio del caso en una escuela de negocios puede explicar que una película infumable haya podido lograr "lo imposible": que a pesar de ser tan, tan mala haya cosechado tantas menciones, tanta expectación y tanta taquilla. Eso es lo verdaderamente imposible. Y no se comprende la paciencia de los espectadores soportando que les cuenten en 107 minutos una historia que no da para más de 10.

Una trama artificiosa innecesariamente enrevesada (aunque muy previsible) sin que, con ello, gane en sentido. Montada sobre unos personajes inconsistentes, llenos de comportamientos absurdos, nada creíbles pero, al mismo tiempo, insustanciales. Le sobran capítulos ya que, como mucho, podría resolverse en dos capítulos, pero optaron por estirar "la goma". Una pérdida de tiempo.

Constituye, en buena parte, un documental -exquisitamente realizado- en el que aquello que, usualmente, constituye la "trama" adquiere, en éste caso, un carácter anecdótico.