Creo que lo único que sacas en claro al ver esta película (que no es poco) es que vivimos en una sociedad contaminada, consumista, enfermiza y obsesionada con unas determinadas normas correctas y un modo de pensar correcto.

El intentar huir de ello, como hacen los protagonistas, es totalmente lícito y admirable, todo espectador siente, en algún momento de la escapada, cierta envidia de: yo quiero hacer eso algún día.

Es una sociedad utópica, pero, quien no la querría? Quien no querría vivir con lo básico, con lo esencial, con lo que te llena el espíritu? Disfrutar de la existencia de uno, comer sólo cuando tengas hambre, no saber que hora es ni que te importe, hacer lo que quieras hacer y cuando te apetezca hacerlo, vestirte solo para cubrir tu cuerpo y no para aparentar...quien no lo querría?

Tremendamente mala. Creo que para lo unico que vale es para alterar las hormonas de los chicos de 14 a 16 años que vayan a verla al cine y que salgan revolucionados.

No contiene un argumento claro, es sexo por sexo y nada más, una especie de película porno con actores de las series famosas de Antena 3 y Telecinco, esos nuevos pseudoactores que empiezan a emerger y que van a durar menos que un pollo suelto en Tailandia.

Me pareció una película que encarna perfectamente la sociedad de los 50 en una América excesivamente conservadora y elitista, sobre todo con las mujeres. Habría que ponerla en muchos institutos de secundaria.

Las interpretaciones, maravillosas, y el reparto, espectacular. Me encantan todas las actrices, caracterizadas cada una como una mujer distinta: la profesora progre, la niña ultraconservadora y envidiosa, la feliz y ambiciosa, la acomplejada, la liberal...

Tiene un significado conmovedor y profundo que solo te llega si la entiendes de verdad y te pones en la piel de esas mujeres.

Pefecta para ver en cualquier ocasión.

Creo que Cameron Crowe se ha lucido en esta cinta, es sencillamente perfecta. Si te gusta el buen cine y la buena música tienes que verla, no tiene desperdicio. Realmente te traslada a los años 70 y tiene notas muy graciosas. Las interpretaciones son todas buenisimas, el protagonista lo clava. Además es bonito saber que eso ocurrió de verdad y que es la propia experiencia del director, que seguro la hizo lo más fiel posible a la realidad. Desde luego te hace ver que aunque una banda aparente estar unida en el escenario, puede estar desmembrandose por detrás de éste.

Buenísima.

Da igual si te gusta o no el estilo de Allen, coge esta obra maestra en el videoclub y prepárate a disfrutar. Digamos que es la primera que se sale un poco de su estilo tradicional, de Manhattan y líos de faldas y psicoanalistas, divanes y teorías de asesinato comediadas. Match Point es diferente y lo sabes desde la primera escena.

Toda la película está perfectamente pensada y bien montada (no se deja nada atrás) y cada detalle está cuidado. Creo que fue un soplo de aire fresco, junto con El sueño de Cassandra (otra buenísima para mi gusto) que se salen un poco de lo común. Me gusta este Woody, y no lo quiero soltar.