Interesante visualmente, pero sin ningún sentido artístico ni creativo. Es curioso a nivel científico, ya que es una IA quien realiza la animación, pero mas allá de eso no tiene ningún interés.

Lo que desentona no es la mezcla de animación y acción real (eso ya ha funcionado en clásicos como "Asesinos Natos"), sino lo mediocre de su producción, las pésimas interpretaciones y que en definitiva parece mas una serie web de YouTube, que una producción de Netflix.
La historia pretende satirizar el mundo de los superhéroes, pero no consigue otra cosa que ponerse en evidencia a si misma. La trama y los personajes están copiada de diferentes superhéroes y franquicias, pero con un gran desatino.
El guión es vago, simple, en ocasiones absurdo, y pretende aprovecharse de la nostalgia para colarnos un argumento gastado, y claramente copiado.
En definitiva, intentan emular a The Boys, pero está mas cerca de Bulk, y otras copias de serie Z turcas de superhéroes.

Pretende ser mas profunda de lo que realmente es; la voz en off es sobreexplicativa, los personajes son estereotipicos, pero lo peor es la historia, totalmente predecible y carente de emoción.

Los mejores capítulos son los mas cortos, y algunos ni siquiera tienen un final, los peores son tan largos que resultan tediosos, solo te mantiene en vilo la promesa de que todo ese caos tenga un sentido al final de la película.
Las interpretaciones son geniales, la fotografía, escenografía, y la banda sonora son impecables; pero ni esto logra salvar un conjunto de historias inconexas y carentes de sentido, mas allá de un conjunto se skeches extravagantes.
Todo esto da lugar a una obra dispersa y vacía, aunque aceptable debido a su originalidad. Pero teniendo en cuenta que es de los hermanos Coen, no deja de ser una gran decepción.

Su fotografía e iluminación son impecables, pero mas allá de eso Andrew Dominik intenta vendernos una historia simple, superficial, y poco original como una historia intrincada, profunda y reflexiva.
Dominik cree que por meter critica social en cada personaje (tan obvia y redundante que pierde el sentido), y un par de metáforas visuales, ya ha cocinado un gran filme. De esta forma se pierde en los detalles y se olvida de la trama.
No por meter largos diálogos y escenas de ultraviolencia va a convencer al publico de que es el nuevo Tarantino.