Hoy en día, visionar un largometraje sobre licántropos y vampiros que sea de un nivel aceptable, por ejemplo, como aquella fabulosa entrevista a Tom Cruise y Brad Pitt, es tan sencillo de lograr, como conseguir la lotería. En este caso, no hay ni suerte, ni excepción alguna, Benicio del Toro hunde su más que increible trayectoría. Con Che, había logrado consagrar su estupenda e indudable profesión. A pesar de creerse que con un sector de la crítica a su favor, no puede cometer los garrafales errores de elegir llevar a cabo semejante papeles como el de esta horrible película. Y el horrible no es por el maquillaje monstruoso, ni por el espantoso argumento, es por la totalidad del largometraje, desde las actuaciones, hasta el cámara que menos cobra. La historia, en su concepto es fácil de entender y, con una buena inmersión en los entredichos párrafos que manejó Johnston, se podía haber convertido en una grata cinta, con un reparto estupendo. En su lugar, ni el mismísimo Hugo Weaving se salva, llevando a cabo, el peor papel de su carrera, queda decir que el doctor Hannibal está pasado de moda, ni con trenzas ni lentillas, logra transmitir miedo. El único miedo que se puede ver, es antes de entrar al cine a verla, y es el precio de la entrada.

Una película así crea más problemas de lo que aparenta. No es un largometraje común para el que nunca haya visto un film de dicha factura. Para empezar por lo positivo, he de decir que estamos ante una sucesión de historias sobre romances espectacular, no son nada predecibles y siempre te consiguen enganchar a pesar de que el hilo principal tiene mucha coherencia, pero basándose en la novela del protagonista. Cada toma, repetitiva hasta la saciedad el poner los actores en 2º plano, se conjugan perfectamente con la ambientación y cada colorido que dislumbra por su preciosidad, a eso le añadimos la banda sonora, occidental y muchos temas clásicos y latinos, un dato curioso que parece que Wong Kar-Wai ha realizado el film para uso occidental. Como lado negativo del largometraje es el propio argumento que se pierde por momentos, usando excesivamente la expresividad, la emoción, pero olvidando que tiene ante sus narices una gran historia que desacredita por dar emotividad a la escena.

Pocas veces he podido ver un espectáculo de tal magnitud que llevara firma española. Es una gran película, muy buena interpretación de Mortensen, el mejor sin duda alguna, aunque su papel a interpretar, tenía ciertas ventajas, como el ser un personaje ficticio, a diferencia del resto, ejemplo de Cámara. Ha sido muy bien adaptada de la novela de Reverte. Una vez más, destaco en la parte técnica. Todo ha sido genial, de gran firma, pero ha fallado algo, quizás la dirrección, ya que ha sido algo floja la manera de contar la historia, faltó más garra. Esa flojera ha producido grandes bostezos en el espectador.

Es un peliculón para mi gusto. Tiene un transfondo social tremendo, gran historia y argumento. Todo es muy bueno, incluso en el apartado técnico, pero lo que castiga a este film es que te duermes aunque te hayas tomado seis litros de café.

Magnífica. SoberBia, poco caber decir solo estas palabras. Lo mejor, ha sido Hugo Weaving, mostrando esa teatriAlidad en la pantalla. Luchó bien ante esa máscara, de tal manera que solo por verle mover era impresionante. Genial argumento, final apoteósico. Se esperaba algo más de acción, pero gracias al cielo, esa acción fue sustituida por un drama, un suspense, de infarto.