Me he reído un buen rato en algunos momentos. A mitad de metraje pierde algo de ritmo, pero después lo recupera y tiene puntos muy buenos. La actuación de John Ritter es de lo más destacable, con una comicidad difícil de encontrar.
Destila aire ochentero por todos sus poros, algo que agradecemos los que ya llevamos algunos años en este mundo.

Tarea muy difícil la de rodar una secuela de una obra maestra. Pero cabe decir que el Sr Villeneuve ha sabido mantener el tipo.
Blade Runner 2049 se nutre de lo mejor de su antecesora para crear una historia lógica, creíble, según lo expuesto en Blade Runner. Y ahí creo que reside el mayor logro de este film: no lucha con su precedesora para ser mejor, más espectacular, más impactante: sabe de antemano que eso lo tiene perdido y elige beber de ello para confeccionar una buena película, con una trama original y un desarrollo más que correcto.
Por supuesto que existe algún pero, algo que no me gusta, pero es imposible contentar a todo el mundo dando continuidad a una clásico de la ciencia-ficción.
En resumen, una buena película, que no defrauda del todo a los que amamos Blade Runner.

No será una obra maestra, pero es un buen retrato de una muy numerosa y silenciosa parte de la población que habita en los aviones, aeropuertos y hoteles de nuestras ciudades. Una vida que puede parecer interesante pero que realmente es una existencia vacía, impersonal, dónde lo mejor es trabajar al máximo para reducir el tiempo de soledad en el hotel, la incomodidad de comer y cenar solo, en una ciudad extranjera, en un hotel que no es tu hogar, en una cama que es la tuya hoy pero no mañana.
En esta película se consigue captar qué es estar todo el día viajando y la rutina que ello conlleva (pequeñas rutinas y rituales que se adquieren de la costumbre); sorprende el personaje principal, alguien que disfruta y predica las bondades y ventajas de dicha vida y que tiene un fin que muchos viajeros comparten: un determinado número de millas, un status de viajante. Pero lo mejor es que se consigue plasmar su evolución desde un viajero orgulloso con un fin a un solitario empleado que se da cuenta que se está perdiendo algo.
Imprescindible.

Insufrible película de Isabel Coixet. Aquí se le va de las manos, un tostón que no hay manera de pasarlo. Es horrorosamente lenta y no aporta nada, pero nada de nada, eso es lo peor, es un ejercicio de egocentrismo que no merece ser mostrado en los cines.

Mala, mala, mala.

Decepción.
La idea es buena, pero el desarrollo es muy malo. Se hace infinitamente larga, hay un tramo de la película en el que no pasa nada de nada, y que tampoco aporta nada nuevo a la trama.
Me da la impresión que sabían como empezarla, tenían un buen final/buena explicación al final, pero no han acertado en como ir del inicio al fin.
Sinceramente, solamente la sigues viendo para que te expliquen cómo acaba. Simplemente curiosidad.
A su favor, pues que da una nueva perspectiva del contacto con seres extraterrestres (eso lo pone en el título, no es spoiler) y como afecta a la sociedad actual. Pero poco más.
Esperaba muchísimo más.