Es una de esas películas que veo una y otra vez: equilibrada, muy bien hilada, con una mezcla de comedia y drama perfecta y una de las mejores interpretaciones de Robert de Niro. Tal vez le sobran un par de persecuciones y algo menos aparatosas; con ese recorte sería una película perfecta, de 10.

Es una de mis películas favoritas.

Este verano se me abrieron las carnes con noticias y escenas que me hicieron recordar esta película, una película que ví hace muchos años y que se grabó en mi memoria para siempre. El abandono precipitado de Afganistán por las tropas norteamericanas y, corriendo como conejos, todos los demás. Creo que fue Holanda uno de los primeros países en perder el culo por sacar de allí a su delegación diplomática ante la inminente entrada en Kabul de los radicales musulmanes, dejando en tierra a traductores y colaboradores afganos con un futuro incierto.

Los que hemos visto "The killing fields" ya sabemos lo que sufrieron los colaboradores camboyanos con la dictadura comunista de los Jemeres Rojos, pero lo que no tengo claro es que lleguemos a enterarnos de lo que están pasando ahora en Afganistán los traductores que allí han quedado, bajo un régimen totalitario musulmán ancestral que persigue homosexuales y lapida mujeres. La Historia se repite pero siempre nos pilla en bragas... o calzones.

Bonita historia de amistad muy bien contada. El que esté basada en hechos reales me importa tres pelotas: es una historia que ya has visto más veces pero muy bien hecha. Ali es magnético, se sale. Mañana intentaré localizar algún disco del virtuoso pianista, a ver como suena. Y no te dan la brasa con la guerra cicvil española ni con la posguerra: absolutamente recomendable.

¡Buff, qué críticas! Tal vez no vimos la misma porque a mí me pareció una película normalita. "Promesas del Este" es totalmente previsible, los tiempos no están bien distribuidos, la intensidad de las escenas está descompensada y creo que la terminan con prisa, cierran la historia de sopetón.

No hacía falta explicar que el chófer —que es superduro de la muerte— "era de Toledo" (subspoiler); a Armin Mueller-Stahl se le ve venir desde el primer momento, y no impone el respeto o el miedo que requiere su dedicación; la sesión de sauna final dura demasiado, es larga de forma innecesaria; Vincent Cassel sobreactúa: más que "el hijo alocado de papá" parece gilipollas... o desayuna farlopa con cereales.

A pesar de todo esto me gustó porque tratando temas tan duros como la mafia y la prostitución, la película se deja ver sin sobresaltos, es "agradablemente triste", gris pero con luz al final.

Es un cosa rara pero se deja ver con comodidad. Parece un documental, es agradable; me gusta la mezcla de las imágenes de secarral almeriense con la música de Miles Davis y Michel Legrand. Es más, son imágenes pegadas a una banda sonora: la "chicha" está en la música. Hace muchos años compré la cinta (casette) de la banda sonora; la he gastado de tanto escucharla, me gusta. Creo que Miles se representa a él mismo en la película, con sus rarezas y su desconexión cósmica. Descanse en paz. La medio historia de amor está traída por los pelos. No obstante, si tus hijos tienen menos de 3 años o les gusta la música "no-petarda", la pueden ver contigo, ya que es para todos los públicos pero de verdad: no hay continuas insinuaciones sexuales chuscas, ni dicen tacos, ni salen políticos, zombies o monstruos mitológicos. Actualmente puedes conseguir el DVD en la web de la distribuidora australiana por cuatro duros.