David Grant es un pintor que desea suerte a una chica que se encuentra por casualidad en la calle. Acto seguido, una mujer la regala un caro vestido. Creyendo que David tiene la suerte de su lado, apuestan a las carreras de caballos. Buena comedia de Milestone, con un dúo interpretativo de lo mejor de la época en el género. Aunque Carson no es un actor que resalte por sus dotes interpretativas, es el ideal para el papel del prometido torpe de G. Rogers.

Cuando una pelicula tiene en su haber 2 oscars (David Niven y Wendy Hiller) y 7 nominaciones no puede ser mala, sino todo lo contrario. Esta obra de Rattigan adaptada con gran eficacia, donde se encuentran en un hotel diferentes personalidades tan distintas, saca a relucir el lado oscuro de las personas con gran naturalidad. Gran reparto y actuaciones sobresalientes.

Alexander Hall, uno de los especialistas en la comedia de enredo a finales de los 30 y principios de los 40, propone aquí un tema que nunca pasará de moda. Un escritora, ferviente seguidora de la soltería conoce a un profesor en un hotel. Por un malentendido, todo el mundo cree que están casados, lo cual conviene a ambos; ella para hacer publicidad y él por un ascenso en la Universidad. Ésto dará lugar a disputas entre los dos y a escenas disparatadas dignas de este tipo de comedias. Buena interpretación de L. Young, muy metida en su papel, no así R. Milland, que resulta poco creíble. Quizá con Fred MacMurray, la película hubiese estado entre las grandes comedias de la época, y amos se hubiesen compenetrado a las mil maravillas. No obstante, la película resulta efectiva y agrada.

Dos horas de película, sólo para ver una lluvia de efectos especiales sin parar. No tiene nada más; las interpretaciones (si se puede llamar así) espeluznantes, la dirección y el guión son pésimos. Al actor principal le daría el premio Razzie del año, porque peor no se puede hacer.
Cuatro freakies (por llamarlos de algún modo) se juntan para defender la galaxia de un personaje sacado de algún psiquiátrico cercano. Lo que más gracia me hizo fue ver a Glenn Close. La debieron pagar un pastón para embarcarse en un film de este tipo. La pongo un 3, porque por lo menos los F/X son aceptables. Si en el futuro nos esperan "actores" como Chris Pratt, no me extraña que los cines terminen por cerrar.

La biografía de F. Eugene Vidocq en esta película tiene algunas lagunas, como por ejemplo, que de bandido se convirtió en informador de la policía, no en inspector; aunque en líneas generales las interpretaciones son bastante mediocres, excepto Sanders, siempre elegante que da a la película ese punto de sutilidad necesaria para que el film no naufrague estrepitosamente. El guión no se sostiene puesto que presenta vacíos cronológicos que lo dejan incompleto. Para efectuar un biopic de un personaje hay que hacerlo concienzudamente y hasta el mínimo detalle, explicando al espectador lo necesario para seguir el film. La dirección de Sirk es, simplemente correcta, teniendo en cuenta lo que tenía delante; aunque la mejor época de Sirk estaría por llegar.