Insustancial thriller psicológico donde un psicópata, despechado por el rechazo amoroso de su novia, se obsesiona con la encargada de grabar su petición matrimonial, actuando de manera contundente para conseguir una relación.

Con un argumento ridículo y nada creíble, un guion poco desarrollado, y sin suspense ni sorpresas, esta película, de ritmo narrativo totalmente plano, pierde cualquier interés desde el mismo comienzo, sumiendo al espectador en un ambiente cercano al de la desgana. ​
Una película, además, que en el plano artístico ofrece unas interpretaciones poco esmeradas y un estilo cinematográfico carente de calidad.

En definitiva: como muchas otras producciones del mismo tipo y de similar género, este telefilm solo nos sirve para mirarlo con somnolencia y luego, sin ningún problema, olvidar.

Muy mediocre thriller psicológico sobre un psicópata obsesionado por una cantante de ópera traumatizada por un anterior acoso.

Este telefilm, con un guion sin elaborar, una trama, en dos únicos espacios narrativos, sin originalidad, y que hasta nos remite, con algún escenario, a las películas de "El fantasma de la ópera", posee un ritmo totalmente plano y, lo que es peor, una acción detenida, donde casi nada sucede, desde el propio comienzo.

En otro aspecto, en el plano de las interpretaciones, los actores y las actrices son incapaces de dotar a sus personajes de cualquier expresividad. Y a nivel de estilo y de técnica cinematográfica, la obra carece de cualquier subsistencia.

Por lo demás, ni el suspense ni la intriga ni la emoción ni la sorpresa se introducen lo más mínimo en el argumento, llevando el tedio al espectador, y provocando que esta realización se esfume, para siempre, de su memoria.

Vulgar thriller psicológico, con un guion muy endeble y una trama muy poco original y bastante descabellada, sobre una psicópata que se obsesiona de forma irracional de sus jefes y trata de enamorarlos, aunque para ello tenga que eliminar cualquier obstáculo.

Este film, lleno de lugares y de contenidos idénticos a los de la mayoría de realizaciones de similar género creadas para la televisión, con un ritmo narrativo totalmente plano, carece por completo de entidad estilística y técnica. Solo la presencia de la actriz principal, Cerina Vincent, provoca cierta inquietud, con sus maquinaciones, en el espectador.

Por lo demás, ni el suspense ni la intriga --mucho menos la sorpresa -- afloran demasiado, como ya he insinuado, en el ramplón argumento de esta mediocre película, que solo sirve para pasar unos noventa minutos de menguada distracción y después, simplemente, dejarla en el olvido.

Muy flojo thriller psicológico y de suspense sobre obsesiones y venganzas.

El argumento de este telefilm es muy poco original, lleno de convencionalismos; y el guion resulta superficial y sin apenas elaborar, lo que provoca un ritmo narrativo totalmente plano que desanima al espectador.

Por otra parte, los personajes carecen de evolución psicológica, y sus intérpretes no cumplen, ni de lejos, con su actuación. Y, como es costumbre en estos productos, los espacios geográficos y los acontecimientos de la trama son similares a los de la mayoría de las películas del citado género realizadas para la televisión.

Un film, a todas luces, carente de intriga y de emoción, donde la calidad técnica y de estilo no hace acto de presencia y que solo sirve para pasar el rato y después olvidar.

Convencional thriller psicológico sobre una doctora traumatizada y vengativa que desea, a toda costa, recuperar un amor de juventud y cumplir su obsesión de tener un hijo, aunque sea en el vientre de otra mujer.

La trama de este telefilm resulta anodina, el guion en el que se sustenta no pasa de ser un simple esbozo y el ritmo narrativo discurre plano; falto de cualquier sorpresa.

Los personajes --es norma en estos productos televisivos-- carecen de procesos psicológicos; y sus intérpretes rozan la deficiencia. Y --cómo no-- los espacios geográficos y los sucesos del contenido argumental son los mismos a los de la mayoría de productos del citado género y medio de emisión.

Una película, pues, que muy poco aporta, casi carente de inquietud, de intriga o de emoción, y que solo nos entretendrá, levemente, durante contadas secuencias de su metraje.

Con una nota, más o menos, de 3.5 quedaría, en mi opinión, bien calificada.