La Ley en el salvaje Oeste era muy clara, el que a hierro mata a hierro muere, y allí el que asesinaba era ahorcado, bien por los que le atrapaban y sin juicio previo le linchaban, o bien tras un juicio con jurado, algo más justo donde el sujeto al menos contaba con la oportunidad de defenderse.

Un sheriff impide el linchamiento de un hombre por una partida de paisanos que le acusan de haber matado al hijo de uno de ellos, y se encamina con el acusado en dirección a un pueblo lejano donde se imparte la justicia de ese territorio. Exiguo guión, sin duda.

Pero la maestría de Raoul Walsh consigue que el desplazamiento y sus dificultades sean otro protagonista más, así como las circunstancias que se van produciendo.

Reparto encabezado por el gran Walter Brennan y su voz de cuervo cantando machaconamente una canción, junto con su hija, la siempre atractiva Virginia Mayo con un pelo corto que aún la hace más sensual, y el duro sheriff con remordimientos, interpretado por Kirk Douglas dan mucho empaque a este western menor que gracias a Walsh se convierte en una más que interesante joya.

Notable, 8.

Thriller de acción apocalíptico, donde lo único sugerente y atractivo es Amber Heard, que va luciendo curvas y modelitos apretados mientra nuestro nunca bien querido Nicolas Cage forma un pandemonium de mil diablos persiguiendo a una secta que raptó a su nieta, mientras William Fichtner representa a un pulcro contable que no sabemos para que aparece y porqué va detrás del bueno de Cage.

Patrick Lussier, el director, parece únicamente preocupado en que la cinta no pierda el ritmo y a fé que lo consigue, y para ello utiliza todo lo que tiene a mano, sexo, alcohol, sangre, violencia, explosiones, muertes por doquier, y su mayor activo, Amber Heard, siendo desde luego, lo de menos, si actúa bien o mal, mientras siga luciendo palmito.

No es la peor ni mucho menos de Nicolas Cage, y de un aprobado pasa a un bien por la interesante presencia de esta chica que le está poniendo muy difícil el divorcio a Johnny Depp. Lo dicho, un 6.

Paul W.S. Anderson firma quizás su mejor película en esta cinta de ciencia ficción plena de suspense y terror, mucho terror sin que aparezca ningún alienígena, aunque sin duda su atmósfera opresiva recuerda a Alien e incluso a Hellraiser, ambas películas de culto.

Sus 90 minutos te tienen anclado a tu butaca pensando que es lo que ocurrió con la nave y su tripulación y cual será el próximo movimiento habida cuenta de los flashback terroríficos que van presenciando todos y cada uno de los tripulantes con sus grandes miedos y secretos del pasado.

Final demasiado precipitado para una película estimable. Un 7 y recomendable para los amantes del terror en escenarios nada habituales.

En el incomparable marco de Benasque, en el Alto Pirineo Oscense, en un valle de cuento de hadas rodeado de montañas, árboles, y regado por sus aguas cristalinas casi de manantial, se produce el secuestro de dos niñas de poco más de diez años que desaparecen para todo el mundo menos para sus padres.

Cinco años después de su secuestro, aparece una de ellas. La serie, de tan sólo ocho capítulos, producida para TVE, se embarca en la investigación de lo ocurrido con la esperanza de recuperar a la otra niña, ya una joven adolescente.

Nos presenta la vida rural española, donde la autoridad es la Guardia Civil, donde su escasa población es muy tradicional y explota sus costumbres, donde la caza y todo lo que mueve a nivel social y económico tiene una gran importancia, además del turismo y los deportes de invierno, donde el cura es casi el eje del pueblo y el veterinario ejerce de médico, y la Cofradía o el Casino es el centro de la vida social de sus vecinos más importantes.

Gran trabajo del trío protagonista, destacando con luz propia Megan Montaner, actriz que conocí en la serie "Sin identidad" y que destaca por su talento interpretativo, bien secundada por Alain Hernández y Francis Lorenzo.

Notable 7. Y recomiendo ambas series, ésta y la mencionada donde Megan Montaner es también la protagonista.

Thriller espectacular, de los de los años 90 plenos de acción y suspense, con un complejo guión donde se tocan todos los palos, desde la ciencia ficción al romanticismo pasando por el espionaje, y ello a través de una pléyade de grandes actores, todos asumiendo en mayor o menor medida su rol de secundarios y donde emerge la figura del denostado Kevin Costner, que realiza una gran interpretación de dos personalidades distintas.

Sólo la interpretación de Costner se merece el notable, un 7 más que merecido.