Esta película no se puede considerar de terror, en todo caso de intriga. A mí personalmente no me dio miedo en ningún momento. Aunque ciertamente, sí me tenía intrigado lo del vídeo, por eso digo que es más de intriga. Realmente me ha decepcionado, porque se oían buenas críticas sobre esta película. La esperaba mucho mejor. Si esta película da miedo, entonces habrá que crear un nuevo género de cine para otras como "El Exorcista", "El Resplandor", etc..., al que llamaremos Hiper-terror. Vamos, lo que quiero decir es que NO, miedo no, desde luego. Ni de lejos. Ni de coña.

Simplemente decir que, despues de haber visto el documental "Earthlings", de corte animalista y dirigido por Shaun Monson" en el año 2003, "Nuestro pan de cada día" se me queda pequeño, quiero decir, no es que esté mal, todo lo contrario, pero si en el documental de Geyrhalter en algunas secuencias se te ponen los pelos de punta, mejor ni hablar de "Earthlings", en el cual no es una secuencia la que te impacta, sino todas, todas son terriblemente duras, algunas imposibles de ver. Si quieres pasarlo realmente mal, si quieres replantearte de verdad tus costumbres, no sólo alimenticias, te invito a presenciar (si puedes, porque es realmente complicado) el para mí, mejor documental que he visto jamás y que veo complicado de superar: "EARTHLINGS", con mayúsculas.

Me ha encantado esta película, además de tener unos toques de humor muy buenos, es hiper-romántica. Le da mil vueltas a las archiprevisibles, ñoñas, cursis y repetidas comedias americanas. Muy original, se convierte en un film muy ameno durante las más de dos horas que dura, cosa complicada en una pelìcula de este género. Disfrute y entretenimiento más que asegurado. Fantástica.

Radiografia al desnudo de uno de los aspectos más criticables de la sociedad norteamericana: su deficiente sistema sanitario. Lamentable es que un país que tanta riqueza produce sea incapaz de prestar y asegurar lo más importante para una persona: su salud. Los que tenemos la suerte de vivir en un lugar donde ocurre todo lo contrario deberíamos quejarnos menos, o mejor dicho nada. Si te vas de viaje a los EE.UU, no te vayas sin seguro médico, por lo que pueda pasar. En caso contrario, seguramente puedes vivir la peor de tus pesadillas.

Suponía que esta película no me decepcionaría y así ha sido. El Intendente Sansho es una película directa que narra con transpariencia y claridad aquellos años en donde la esclavitud era legal, así como las crueldades y torturas derivadas de ella. Otra joya más del buen cine japonés.