Hay sagas que no pierden con las segundas e incluso con las terceras partes. Esta es una de ellas, se prevee que sea la última porque la amnesia del protagonista no da para más.
La película tiene (y ya es difícil) más acción que las anteriores y Bourne a pesar de sus recursos sigue dando lástima, por su soledad y porque da la sensación de que en cualquier momento pudiera morir. Es por este realismo, a pesar de la acción espectacular y desbordante, por el que este espía le da mil vueltas al oto J.B. (James Bond).
Lo dicho vale para toda la triología.

Película del oeste con historia convencional, aunque no por ello deja de ser efectiva.
Buenas interpretaciones de la pareja protagonista y buena réplica de los secundarios.
Si de verdad le gusta este género no entiendo que la película le pueda defraudar, a mi parecer tiene un aire clásico y salvando las distancias, por momentos me ha recordado a grandes westerns como Duelo de titanes e incluso Río Bravo.
En fin me alegro de haberla visto.

Os hará pasar un buen rato. Tiene ritmo, diálogos y situaciones muy divertidos y además conmueve.
La vas a ver porque le apetece a tu novia y te acaba gustando más que a ella.

A pesar del reparto, la película no me convence, los personajes me resultan superficiales y hay poca química entre la pareja protagonista.
No se si será por el papel o por ser su segunda pelícua pero Burt Lancaster no brilla como en otras ocasiones (Me imagino que por el guión porque en Forajidos lo borda) , tiene un personaje al que se le da poco protagonismo y que no le deja lucirse, repercutiendo en el resultado final.