Tom Ripley, un joven con aires de grandeza pero sin riqueza alguna decide hacerse pasar por rico y camelar a una familia enriquecida, especialmente a Dickie, un joven malcriado. Sin embargo, determinados sentimiento afloran en él, y los celos le llevan a cometer un terrible error.

A partir de ese momento, la vida de Tom va a estar más ligada que nunca a la de Dickie, pero no será fácil pasar desapercibido para quienes los conocen a ambos...

Aunque Matt Damon es para mí uno de los mejores actores que el cine actual me ha dado la oportunidad de conocer, ésta no es ni de lejos su mejor actuación, aunque aprueba con nota.

Lo mejor: Es muy entretenida. Jude Law está fantástico durante toda la película. El Matt Damon celoso, su mirada, tan tierno y al mismo tan fuera de sí... da lugar a la que quizá sea la mejor escena de la película... Te hace pensar...

Lo peor: Gwyneth Paltrow. Sosa, repelente e incapaz de transmitir nada. Creo que en sus inicios era mejor actriz.

Los Ludlow viven felices apartados de la ciudad, especialmente desde que Susannah, acompañada de Samuel, comienza a formar parte de sus vidas. Pero la felicidad no dura eternamente, y fuertes sentimientos aflorarán en los hermanos, rompiendo la unión que tiempo atrás habían tenido. Cuando Samuel decide ir a la guerra, partirá para siempre el corazón de su padre, que tendrá que enfrentarse a los miedos que creía ya superados...

Al menos en mi entorno, la mayor parte de quienes critican negativamente esta película, no han llegado a verla, y la consideran una historia de amor aburrida. Pero no lo es, ni de lejos, el amor es sólo un complemento más de la película, que nos habla del sinsentido de las guerras, y del daño que los malos gobernantes pueden hacer a las personas.

Lo mejor: Demasiadas cosas para nombrarlas en un sólo punto. Veamos:
1. La banda sonora. Sin duda una de mis favoritas, con ese aire de tristeza que te envuelve y te ayuda a entender mucho mejor los sentimientos de los personajes...
2. La fotografía. Preciosos paisajes, magníficas tomas.
3. Los actores. Empezamos por Brad Pitt, que, vamos a reconocerlo, en esta película nos gusta más por su físico que por su actuación. Seguimos por Aidan Quinn, tan frío, tan seco, que consigue caer mal y dar pena al mismo tiempo. Es lo que pretende, así que tiene un Notable alto en su actuación. Henry Thomas (¿sabíais que era el niño de E.T?) es quizá el menos destacado y sin embargo a mí me parece que está sublime en su papel, si bien hay que reconocer que de los tres es el que tiene un papel más fácil. Ella... bueno... me cae bien, pero en esta película me parece una petarda integral... prefiero mil veces a la chica que hace de Elizabeth II. Y por último el gran Anthony Hopkins, ¡genial! Imagino que la segunda parte de la película tuvo que ser muy dificil para él, pero logró bordar el papel (¡Qué se jodan! - Referencia a la película).
4. El maquillaje de Anthony Hopkins. La primera vez que la vi, no fui capaz de reconocer al actor.

En fin, que si no la has visto, no opines a la ligera, ¡hoy puede ser ese día! Al fin podrás dejar de decir que sólo es una sosa película de amor para desear revivir nuevamente la historia.

Un Bruce Willis que derrocha energía y carácter, y un Reginald Venjhonson al que parece encantarle actuar como policía, logran convertir esta película llena de efectos especiales impresionantes (si se tiene en cuenta la época de la que procede) en una excelente película llena de intriga y suspense.

Coge ya las palomitas, porque una vez que empiece la acción, no podrás moverte del sofá.

Es casi un cuento de hadas,, en el que la interpretación de Tom Hanks me parece brillante, al igual que la de Catherine. La película en sí tiene cierta magia, y un toque rebelde. Sin embargo, tiene un fallo, y es, en mi modesta opinión, el tratar de alargar más y más la película, lo que convierte a una primera parte magnífica, con un toque de humor y muy entretenida, en el precedente de una segunda parte en la que vas mirando el reloj con ardiente deseo de que ocurra algo, como por ejemplo, terminarse.

De una peli de este tipo nunca espero demasiado, pero me gustaría poder decir: "al menos me he reído, tiene sus toques de humor". Es predecible, aburrida y de mala calidad, con guiones poco acertados y demasiada facilidad para introducir elementos como el LSD como algo común entre entre"la gente guay", vendiendo estos productos como algo "casi bueno"

Otra cosa que tampoco me gusta es su afán por demostar la importancia de ser "lo más" en el instituto, para no quedarse rezagado o convertirse en "bicho raro" por ser inteligente.

No esperaba gran cosa, pero no me queda más remedio que suspender este film que considero, además de basura, un mal ejemplo para cualquier adolescente.