Una película sorprenderte, cine bélico- social bien abordado. Mel Gibson presenta a un joven, Desmond Doss, que fiel a sus principios, por encima de las convenciones sociales y de las leyes del propio ejército, toma la decisión de alistarse como soldado durante la II Guerra Mundial, con la convicción de poder ser útil sin ejecutar una sola muerte. El rechazo genérico a lo diferente, la rigidez de las normas y la doble moral, acompañan al relato de forma transversal. Un historia de resiliencia y superación. Lo mejor del film los comentarios finales del propio Desmond Doss y de algunos compañeros.

"El amanecer de la justicia" con una primera parte lenta y algo tediosa, cambia de ritmo sobre la segunda hora de metraje de la versión extendida, para ofrecer una verdadera lucha de superhéroes contra un enemigo común. Con dos partes claramente diferenciadas en ritmo y contenido, obtiene un resultado que nos permite disfrutar de una película de superhéroes.

Drama brillante que oscila entre la acidez y el humor negro, enmarcado en tres generaciones de mujeres de la familia Weston. El film da comienzo con el regreso de las hijas al domicilio familiar ante la misteriosa desaparición de la figura paterna.
Gran reparto con espectacular interpretación de Maryl Streep como matriarca atormentada por un pasado que continua haciendo mella en su presente, enferma e histriónica mantiene un relación con sus hijas marcada por el reproche y la crítica socarrona.
El peso de "lo no dicho", las confrontaciones desgarradoras entre madre e hijas y los patrones de transmisión intergeneracional quedan reflejados a la perfección en esta trama entretenida en la que cada detalle cuenta.

Cine de denuncia social que nos traslada al contexto islámico. Radu Mihaileanu presenta, con un argumento que evoca a la heroína Lisístrata del dramaturgo griego Aristófanes en su "huelga de sexo", la lucha de un grupo de mujeres que tiene como objetivo cambiar las tradiciones en una pequeña aldea de Oriente Medio.
Si bien podría señalarse la existencia de una mirada un tanto estereotipada, "la fuente de las mujeres" con un ritmo lento y cargado de primeros planos, destaca porque permite conectar con los personajes y participar del proceso, sin duda costoso, que suponen las pequeñas revoluciones cotidianas. Así, la esperanza, la fortaleza y el inconformismo de las nuevas generaciones, deseosas de cambiar patrones patriarcales, contrasta con la resistencia de hombres y mujeres que por temor al cambio, permanecen acomodados en las tradiciones.
Una película franco-rumana sobre la que reflexionar.

Excelente interpretación de Reese Witherspoon, que se enfrenta a una travesía desértica como reto personal.
El viaje posibilita el encuentro de la protagonista consigo misma, así como una revisión integrada de sus vivencias.