Evidentemente vemos muchas veces películas malas, pero tan malas como esta creo que pocas veces. Estamos ante una pésima adaptación de la novela en la que se basa (que tampoco es que sea una gran novela), un guión, yo diria que hasta mal hecho y un actor medianamente bueno desaprovechado en un personaje tan poco definido. La dirección por parte de Mary Harron hace aguas en casi todos los sentidos, y creo que lo único que destacaría de esta película es su banda sonora que parece más propia para acompañar a otra historia. En definitiva una pelicula para archivar en la carpeta "bazofias del celuluide".

A pesar de la polémica con la que vino esta película, acabó defraudando. Se trata de una película aburrida, que en ningún momento logra enganchar, con unas interpretaciones sobreactuadas y con un argumento delirante, propio de alguien que desconoce estos temas teológico y que se atreve con lo que no sabe. Si Cristo hubiese tenido alguna última tentación, no hubiera sido la afectiva que plantea éste bodrio, hubiera sido otras tentaciones más profundas como la duda, la desconfianza... Se tiende a humanizar la figura de Cristo hasta extremos rastreros. Creo que el mensaje que pretende insinuar o trasmitir la película esta mal planteado y acaba desconcertando al espectador.