El final muy previsible. Que Nino iba a volver a aparecer pero no para hacerse cargo de su hijo, estaba claro. Tenía que volver a menear la vida de Elena, ahora que iba todo bien. Y que ella se ponga tan contenta dejando a un margen todo lo que ha conseguido ella sola, a pesar de él, que ni come ni deja comer.
Lo dicho, la serie no es que sea buenísima pero ese final...
Dan ganas de meterse en la TV y darle un par de tortas a la chica. Defiéndete, mujer!!! Y mándale ya a la merde.