La megalomanía y egocentrismo de HAL, como el único que puede y es capaz de llevar a cabo la misión, y que los humanos son prescindibles e incluso estorban es algo que está manejado de manera magistral. Y el apoteósico final con la increíble música de Strauss de "Así habló Zarathustra", con el nuevo inicio del Ser Humano.

Pues desde el inicio, con la impresionante batalla contra el Balrog de Morgoth (que es para mi el mejor inicio de las tres películas) ya se ve lo que viene. Frodo y Sam guiados por Gollum (en serio, la primera vez que lo vi no pensé que fue realizado por ordenador) hacia Mordor. El encuentro con Fáramir, que aunque es distino que en el libro, para mí es mas creíble y coherente (casi ya se volvió mi versión oficial) y hace que el personaje evolucione. Podría decirse que Merry y Pippin no hacen mucho, pero lo mencionado antes, su trama en la historia igual de importante. Y Aragorn, Légolas y Gimli con el espectacular regreso de Gandalf. Arwen, aquí mas bella que nunca, muy acertado con la decisión final que se tomó con respecto a ella (no tenía para nada que hacer en el Abismo), El Reino de Rohan y la Batalla del Abismo de Helm como una de las mejores filmadas en el cine. Y el final que te deja con la miel en los labios. Al igual que en la Comunidad del Anillo, recomiendo ampliamente la Versión Extendida.

"¿A qué nos estamos aferrando Sam?"
"A que existe la bondad en este mundo. Y que vale la pena luchar por ella."

Después de esta muy extensa reflexión personal me queda la satisfacción de que este excelente documental me haya dado la oportunidad de expresarla. Y es que finalmente cada quien tendrá la suya. Para algunos Richard Dawkins les parecerá uno de los hombres más visionarios y progresistas que han conocido y al que rápidamente le darán toda la razón al verse identificado con sus posturas. A otros les parecerá alguien sumamente molesto, arrogante y odioso porque viene con preguntas incómodas que solo producen ruido a sus idílicos sistemas donde son reyes. A mí me parece alguien muy valiente (imprudente en muchos casos) y necesario, aunque sí, en muchas ocasiones a lo largo del documental se comporte como el buen etólogo que es, observando curiosamente a la “manada” practicar sus correspondientes ritos y costumbres según el entorno en que se encuentren. Sus teorías y conclusiones, así como sus diálogos con personas de distintas religiones, muchos de ellos en verdad tensos y acalorados (hasta llegué a preocuparme de que fuera golpeado en algunos de ellos), son de lo más interesante de observar. Y si, personalmente si considero que se conduce de manera algo arrogante (pero honesta) con sus interlocutores, lo que le vale los problemas que mencioné, pero es que, siendo sinceros, dialogar con personas tan cerradas y fanáticas (sean del extremo que sean, creyentes o ateos), es en verdad muy pero muy difícil. Su denuncia es muy válida acerca del control mental al que somete la religión, y he de decir que personalmente pienso que está completamente en lo cierto: la religión impide el uso de la razón y el libre albedrío que divinamente poseemos. Sí, lo sé, meter el concepto de divinidad sacará ampollas a algunos. Soy espiritual y lo reconozco. Y soy científico y también lo reconozco. Son dos realidades que hacen lo que soy. Creo que hasta que el mundo se dé cuenta de ello, de que somos espíritu y materia, estaremos realmente en paz y nos dedicaremos a avanzar y a progresar sobre ello en lugar de ponernos trabas entre nosotros. Pienso que espiritualidad no es religión, pero eso es meternos en otro berenjenal. Pero bueno, al fin y al cabo ésta es solo mi teoría y cada quien tendrá la suya (eso es lo ideal y no que se le imponga alguna sin poder ser razonada ni cuestionada), y solo lo que nos queda es el respeto y la tolerancia para poder vivir. En fin, un documental ampliamente recomendable y que vale mucho la pena ver. Me quedo con su magnífica reflexión final, acerca de la improbabilidad de la vida entre todas las probabilidades, que como dije, para mí esa complejidad que apenas comenzamos a entender no es ninguna coincidencia. Pero saquen ustedes sus propias conclusiones...

Detonantes de la sociedad como la avaricia y xenofobia (el iraní de la gasolinera), homofobia (por homosexualidad o bisexualidad inaceptada del protagonista), envidia (la “pareja perfecta” de novios), celos (hacia su amigo por haber encontrado con quien tener sexo) o simple y sencillamente “la vieja que jode a todo mundo” a la que toda la bola de altaneros presentes en la playa le traen unas ganas bárbaras de hacerla callar de alguna manera (pero que nadie se atreve), mostrándose muchas veces que el poco o nulo respeto hacia los demás es tolerado siempre y cuando no pase “ciertos límites”, como si la violencia a dosis bajas pero continuas no hiciera daño. Y luego la sociedad hipócrita se sorprende con las balaceras en colegios o los asesinos seriales. Es de risa ver por ejemplo la xenofobia del “testigo” del ataque al iraní implicando negros y mexicanos, o la homofobia recalcitrante del detective que tiene que hacerse cargo de investigar el caso del “marica lame-culos muerto”. O simple y sencillamente el trato de la “gente bien” hacia los demás. Cuestiones que están profundamente enraizadas en la sociedad y que la enferman.

Es ahora en su visionado total que he confirmado la grandeza de esta serie que ya me había cautivado de pequeño. Desde las revisiones históricas de aquellos personajes que cambiaron la concepción de nuestro mundo en las diversas áreas de la ciencia, hasta los viajes por el espacio y teorías, algunas de ellas de lo mas extravagantes y complicadas de entender. En muchas de ellas no es tanto la "superficialidad" con la que se encuentran tratadas lo mas importante, sino la accesibilidad con la que se le plantea para que aquel espectador con bagaje cultural promedio sea capaz de comprender, y lo mas importante aun, que inspire la curiosidad y pasión por investigar y conocer que tanto ha avanzado el conocimiento y lo que ahora ya sabemos. Como menciona Sagan, quizás si existimos dentro de algunos siglos nuestros descendientes nos verán con curiosidad y asombro acerca de como ignorábamos y nos preguntábamos acerca de cuestiones para ellos tan normales y elementales, tal como ahora lo hacemos nosotros con nuestros antepasados; y sin embargo al igual que nosotros entenderán que es gracias a esos descubrimientos e ideas por lo que poseen el mundo que conocen. Por lo pronto, son ya 50 solsticios y equinoccios los que hasta donde sé he tenido el privilegio de viajar en esta nave azul. Y es el deber de todos los que a bordo estamos el conservarla.