Aún recuerdo el día que se me ocurrió ir a ver esta película, al principio eramos como 40 personas en la sala, a los 15 minutos quedabamos 3, intenté por todos los medios aguantar para no ser el último en salir pero fué imposible. Otra persona abandonó su asiento ya solo quedabamos 2, escena tras escena me iba poniendo de muy mala uva pensando en porqué la otra persona no se levantaba ¿estaría durmiendo?, total que más o menos a la media hora no pude más y me largue como alma que lleva el diablo, al salir sentí remordimientos y me dieron ganas de entrar de nuevo a ver si la persona que quedaba en la sala se encontraba bien, ¿tal vez le ha pasado algo? pense, pero luego al día siguiente me pase por la sala y pregunte al taquillero si el día anterior a alguien le había pasado algo, afortunadamente el cinéfilo estaba en perfecto estado de salud (aunque mentalmente lo dudo).

P.D.-No he vuelto a ver una película de Peter Greenaway.

Si, el argumento ya sabido es algo chorra, los soviéticos invaden EEUU a través de... pasmensen (Cuba y Nicaragua) y saltan en paracaídas en mitad de Wisconsin (o lo que sea) sin que se entere
ni el NORAD, ni la CIA ni la Asociación Nacional del Rifle. Con este argumento fantástico John Milius hace una película para pasar una tarde de Sábado comiendo palomitas y no pensando en demasía, acusar a esta película de panfleto propagandista esta bien y es chupiprogre pero vamos si el director hubiera querido eso se lo hubiera currado un poco más por favor. Para mí muchísimo mejor que muchas de las cientos de películas sobre Vietnam y Afganistán, esta por lo menos divierte.

Película floja, que tiende a ensalzar a los ultras haciendo creer que los valores que tienen son en parte buenos. A mi me parece bastante plana, y realmente dan ganas de reirse de la mayoría de las cosas que salen, si esto le parece a alguien real apaga y vamonos.
Cosas que no me cuadran:

Que un tio se meta en la panda con tanta facilidad.

Un tio con cincuenta y pico tacos que sufre la perdida de un hijo en una pelea, sigue en ese mundo como si tal.

Que 4 pringadetes se peleen contra 50 y no mueran en ese mismo instante.

Que les muelan a golpes (literalmente) y al rato esten tomando cerveza tan contentos.

Que un tio supuestamente piloto este metido en ese mundo.

Que un ex-ultra tenga un curro en el que gane más pasta que el tio Gilito, este casado con un pibón, tenga un hijo y te cuente que le entran ganas de meterse en peleas.

Y alguna otra cosa más que se me olvida porque tampoco he prestado demasiada atención.

Pero bueno si hay gente que conoce ese mundillo y dice que es realista pues no seré yo quien les contradiga.

Le pongo un 4 porque Claire está muy buena.

No vamos a hablar de peliculón ni nada por el estilo, pero para mí una película con un tema tan repetido y visto mil veces en películas, (la típica adolescente que tiene que sacar a su familia adelante en un entorno hostil) que hace que me apetezca seguir viéndola sin quedarme dormido merece el aprobado.

Es el contador de cartas como podría haber contado billetes en un banco, el juego no es más que una excusa para una película que lo único que pretende es denunciar o redimirse de los abusos que cometieron en las prisiones de Irak los americanos.

Empieza bien analizando y explicando porcentajes y probabilidades del juego y a la media hora ya ni se ven las cartas y se empieza la verdadera intención de la película.