Miedo añejo, miedo del que recuerdas cuando estás después sólo en tu habitación y piensas en dar palmadas para hacer la broma pero no te atreves vaya que te aparezca alguien por detrás. Esas son las buenas películas de terror las que después de verlas recuerdas y recuerdas cosas y te dejan una sensación agridulce. Me ha gustado mucho.

Para empezar diré que no la ví en 3D (gracias a dios) porque un amigo la vio y me dijo que era como cojer tus 7 u 8 € y tirarlos a un basurero, teniendo en cuenta que excepto en un par de escenas no noto nada en perspectiva ni nada de nada. Pero bueno ahora hablemos de LA TAN ESPERADA FURIA DE TITANES. Antes de ir a verla cualquier persona ya debería presuponer que va a ser infimamente inferior a la antigua (aunque personalmente a mi tampoco me gusta la antigua, me quedo con "Jason y los Argonautas" o "Ulises" con el genial Kirk Douglas antes). Para empezar Hades no pinta nada en la historia, aunque Ralph Fiennes cumple, pero ya es algo que no pinta nada ya que si la historia gira en torno a Zeus (Liam Neeson como siempre carismatico) y su hijo bastardo Perseo (Sam Worthington no se cuando empezarás a actuar, pero va siendo hora, aunque en Terminator Salvation casi eras lo mejor). Después tenemos los combates ultrarapidos contra las criaturas que parece que tienen prisa (excepto los escorpiones), sobre todo cyber-medusa (se nota el ordenador demasiado y hace que pierda toda la gracia). La única de las criaturas que me ha gustado es el Cracken y tampoco lo han hecho bien pero al menos ha sido un sabor agridulce en la boca no agrio del todo. Entretenida está, eso sí, es lo único bueno que tiene, bueno eso y que sale el búho de la antigua pero 3 segundos.
Por enesima vez, productores, directores, guionistas (si es que todavía existís en USA), ¿cuando vais a crear algo nuevo de una vez y vais a inventar y dejar de copiar y de manchar clasicos que debieron quedarse donde estaban y no ser mancillados?

Death Proof es la peor película de Tarantino con diferencia. La mayoría de los diálogos son una porquería y son estupideces, los personajes femeninos son despreciables y la música es tragable. Lo mejor de la película es Kurt Russell y por eso le he dado un 3, por él y por la maravillosa escena nocturna pero me parece que Tarantino ya no es lo que era. Kill Bill vol.1 es una porquería le duela a quien le duela una película fría y con un plano y previsible argumento, la 2ª está mejor pero tampoco se acerca siquiera a Jackie Brown por ejemplo, la última buena película de Tarantino. No se si Quentin volverá a ser lo que era y volverá a hacer lo que hacía pero Planet Terror para mí supera a este bodrio por goleada, genial Robert Rodriguez, eso sí es un homenaje, entretenida y divetida, no como esta intragable y sosa. Una pena.

Dirty Dancing tenía a Swayze y una genial banda sonora, y su argumento tenía encanto, Ghost es un thriller sobrenatural con un trasfondo de amor, incluso city of angels no está mal comparado con esto. Una historia absurda, surrealista aunque quiera parecer realista y con interpretaciones malas, aunque Gere medio cumple pero Julia Roberts espero que quede claro SIEMPRE HA SIDO UNA ACTRIZ MEDIOCRE, SIEMPRE, de hecho no sé como ha llegado donde está, cuando su mejor película es Mary Reilly, y porque Malkovich es el actor principal. Ni siquiera la banda sonora se salva de la quema, no tiene nada de atractivo este bodrio. Lo mejor: cuando termina. Lo peor: que se convirtió en un icono de los 90.

Una estrella del rock es encontrada muerta en la cama con un montón de puñaladas con un picahielo. Michael Douglas (siempre infravalorado y sin embargo siempre brillante) es un policía, recuperandose de su adicción, al alcohol y al sexo que queda encargado del caso después de que la principal sospechosa sea la novia del rockero asesinado, y tras poner "nerviosos" a todos los policías en el interrogatorio, empieza la vigilancia de Nick. Sobresalientes trampas de guión, inquietud, y intriga de principio a fin. Su alto contenido erótico hace que sea una película distinta del resto, y su final llega casi sin darte cuenta. Imprescindible en cualquier colección.