Tras una primera temporada mediocre, la segunda temporada es indecente tanto a nivel argumental como interpretativo.

Desde el capítulo 1, la trama es siempre la misma: planificar huida, intentar huir, plan fallido y vuelta a comenzar. Así capítulo tras capítulo.

No tiene ninguna lógica. Es un argumento estúpidamente infantil y aburrido. Todo falla en esta segunda temporada innecesaria.

Puedes ver el primer capítulo y el último y no te pierdes nada.

Es una pérdida de tiempo lleno de diálogos de risa e interpretaciones de festival de fin de curso.

Cuando comencé a ver la serie me acordé mucho y mal, de quien me la había recomendado. Me decía a mí mismo: ¿qué es esto?. Pero decidí darle una oportunidad y no sólo me encantó si no que me enganchó. Soy fan de Paquita y de todo el elenco de artistas que colaboran en la serie.

Es una serie que hay que ver. Drama, comedia, absurdo, ternura, musical...lo tiene todo y sobre todo sencillez.

Famosos haciendo de sí mismos y riéndose de sí mismos. Paquita es una cantera de nuevas caras y de mucho ingenio.

En el minuto 5 te olvidas de Brays Efe y sólo ves a Paca, la gerente de PS Management en busca de actrices 3-60.

El comienzo de la serie te deja muy descolocado. Arranca con estereotipos muy encorsetados. Una ladrona con un aire exagerado a Wynona Ryder y que no acaba de calar. Sin embargo, a medida que avanza la serie aparecen muchas subtramas que dan sentido y coherencia a una serie pensada para un público adolescente. Parece la típica serie de adolescentes americana, pero tiene más miga de lo que expone en su piloto.

Para nada es una gran serie, pero entretiene y además goza de una muy buena banda sonora.

Acabas cogiendo cariño al trío de chicas cuya finalidad es encontrar la felicidad dentro de un mundo en el que se sienten anuladas y encerradas.

Un viaje hacia la aceptación sexual, hacia el concepto de familia escogida y hacia el empoderamiento como mujeres que tienen que vivir en un mundo controlado por hombres.

Capítulos cortos y con una frescura que va creciendo casi sin darte cuenta. La segunda temporada, realmente es una continuación temporal exacta a la primera temporada.

Es un "Sexual education" para todos los públicos.

La serie es previsible y aburrida. La trama, inexistente, es una improvisación continua de acontecimientos que no se han ideado bien mientras se escribía el guión.
La serie llega a distraerte un rato, pero cada capítulo es como el día de la marmota. El final es con diferencia lo peor de la serie.
Nunca entenderé quién aprueba la producción de semejantes castañas.Se han gastado un pastizal en una idea mala.

La película es indecente. Totalmente previsible e incoherente.

El planteamiento no engancha, el nudo es aburrido y el desenlace grotesco.

Clichés y más clichés de otras películas y series. Del guión mejor no hablar.

Yo no entiendo cómo hay productoras que financien estos proyectos.