Hal Hartley se pasa al género negro en esta maravillosa cinta independiente deudora directa de las películas del mismo estilo del francés Jean Luc Godard pero no por ello impersonal (en absoluto). De nuevo personajes rotos y perdidos en un entorno hostil, de nuevo el azar y sus locas situaciones, de nuevo un ambiente onírico y de nuevo geniales diálogos, además de una puesta en escena imaginativa, surrealista y tragicómica y como pocas. Al mismo nivel que las inolvidables "Trust" y "Simple men". Genial thriller casi sobrenatural de relaciones humanas.

Nuevo cambio de registro de Kitano tras la desencantada obra de yakuzas Hana-Bi: una comedia heredera en parte del humor propio de Humor Amarillo, llena de lirismo y evocadora como pocas sobre la simple historia de un niño que busca a su madre y que es acompañado en su epopeya por un viejo yakuza egoista, bruto y desconsiderado que poco a poco se va abriendo al mundo, a la vez que el propio niño. El humor que desprende todo el metraje puede ser criticado por muchos por el hecho de basarse en golpes y caídas y en violencia vistosa o en insultos a otros personajes de la trama. Sin embargo, es ese el humor particular del autor, y no puede entenderse por completo si uno no es fan suyo. Genial y personalísima comedia, para llorar de tristeza y de risa.

El guión es malo por disperso y gratuíto, los actores (aun siendo algunos buenos) están muy regulares y Sam J. Jones tiene un carisma cuestionable como Flash Gordon. Aun así, no deja de ser una entrenida película de aventuras por la que el paso del tiempo se ha dejado notar, lo que por otra parte también le suma encanto. La ambientación hiper colorista y barroca es más original que la mayoría de las impersonales y mediocres películas del Hollywood actual.

Empieza bien esta película de Tim Burton: realizando un esperpéntico retrato de la peor Norteamérica, la de los patriotas, los catetos, los militares, los artístas vacíos y encumbrados, los intransigentes... Y con unos marcianos graciosillos con miles de artefactos locos. Por desgracia, estos marcianillos no pasan de ser unos "Gremlins" o "Critters" de Marte que hacen lo mismo que hacían ellos: destrozarlo todo con más o menos gracia. El problema es que lo que empieza como una más que interesante parodia satírica se queda en eso: en otra película de bichitos malos del montón, distraída pero finalmente del montón.

Muy destacada y divertidísima obra freak sobre personajes perdidos en la Norteamérica más profunda. Ágil y amena comedia coral llena de referencias musicales y contraculturales, es "Mistery Train" otra de las personales obras del estrambótico Jarmusch, que hace de la limpieza narrativa su mejor baza, creando siempre películas simples y sencillas hasta decir basta pero llenas de su extraño e inconfundible encanto.