Este tipo de películas están bien para que no se olvide la historia ni a los que lucharon por la libertad.
En cuanto a la calidad del film, pues se puede decir que podía haber sido mejor, pero también podía haber sido peor.
Las actuaciones, bastante dignas y buenas, las subhistorias, pues algunas interesantes y otras un poco cutres. Quizás al homenaje a estas mártires socialistas le falta mayor emotividad no forzada (como se hace con la música por ejemplo).
A favor hay que añadir la buena ambientación, y reencontrase con la gran vía madrileña de los años 40 ha estado muy bien. En contra, que a veces se haga demasiado pastel.
En definitiva, me gustó, quizás también por la temática, al identificarme con los protagonistas. La doy un 6,80.

No he leído la obra literaria, pero intuyo que en la adaptación al cine se ha perdido un poco del elixir de algunos personajes de la novela e incluso algunos aspectos hayan sido exagerados.
La película está bien, a veces un poco lenta pero consigue enganchar acercándose de forma un poco original (a través de unos niños de bandos diferentes) a un tema muy manido ya en el mundo del celuloide como es el del genocidio nazi contra el pueblo judío. Es cierto que en la peli hay momentos que uno parece estar viendo una telenovela, con malos muy malos (los nazis más extremos) y buenos muy buenos, pero así en general se deja ver y posee una bonita fotografía.
En ocasiones peca de demasiado empalagosa y todo queda culminado con un final bastante contundente que creo le da más valor al film. Un 6,25.

Antes de empezar la crítica he de decir que soy de izquierdas. De la izquierda que cree en la lucha de clases, el reparto de la riqueza y la defensa de la igualdad de oportunidades. Es triste tener que empezar una crítica de cine así, pues debería dar igual mi ideología a la hora de disfrutar y debatir con ella el arte. Pero esto es a lo que obliga la época actual de la división, el enfrentamiento, los bandos y lo políticamente correcto.
Volviendo a la película que nos atañe, la primera cualidad que doy de ella es que no es mala. De hecho, podría haber sido una muy buena película de adolescentes. Sin embargo, cede todo su potencial por el fervor de convertirse en un panfleto (por lo visto, basado en una obra literaria). Para ello, la cinta se llena de clichés de todo tipo, con personajes planos y con dos bandos demasiado diferenciados: las chicas progresistas e interraciales (no sabía yo que dentro de la comunidad negra había desaparecido el machismo) que son casi perfectas, y los chicos neandertales que solo piensan con el pene. Salvo uno. El típico y eterno prototipo de príncipe azul que resiste de la tradición oral de los cuentos, que Disney modernizó y que consigue aguantar incluso las embestidas del feminismo más extremista.
En definitiva, no soporto las producciones que directamente te venden ya el posicionamiento modo telenovela con una verdad absoluta. Hubiera sido una buena oportunidad para crear ambigüedad y que los espectadores, en su sano y libre juicio independiente, llegaran a la conclusión que quisieran, sin negar, por supuesto, que en occidente seguimos manteniendo algunos comportamientos machistas. Pero aquí queda tan exagerado que cansa y crea justo la sensación contraria: acabas aborreciendo a las protagonistas. Es más, llega un momento que hasta te planteas argumentos que suele utilizar la ideología conservadora (de ahí mi extraña introducción): ¿por qué no aparece ninguna mujer musulmana? Es sin duda, el colectivo más discriminado aún en el mundo dentro del sexo femenino. ¿Oportunidad perdida por olvido o por miedo? Cosas curiosas.

Y todo esto finalmente para resumiros que esta producción se convierte en un panfleto poco digerible, el cual está dirigido a un público muy concreto y que no recomiendo para quienes no sean feministas radicales ni para cinéfilos que pidan personajes más redondos y menos planos y simples.

Jack Falstaff, personaje entrañable de gran parecido físico y psicológico al moderno Torrente, es el buque insignia de esta interesante película de Orson Welles que mezcla realidad con fábula y que te arranca algunas sonrisas a la par que muestra grandes escenas cinematográficas.
En su debe hay que subrayar que el metraje es bastante excesivo y que algunos momentos (en especial algún monólogo, ya que aunque esté basada en una obra de Shakespeare, esto es cine, no teatro) se hacen demasiado cansinos entre otras cosas por su intrascendencia.
En definitiva, recomendable film que deja un buen sabor de boca, aunque es necesario recalcar que el que la vea tampoco espere ninguna maravilla. Un 7.

"DeVour" (que es el título original de la película), es en sí una producción de Serie B que contiene los defectos cutres propios de una obra cinematográfica de este tipo. Pero, más allá de eso, se trata de una muy interesante película de terror muy alejada del cine del género típico comercial sobre adolescentes que sufren persecuciones y asesinatos.
Dentro del argumento hay una estructura muy sólida y una historia bastante terrorífica que va ganando con el paso de los minutos y que además cuenta con un desenlace genial que da una "agradable" sorpresa al espectador.
Muy recomendable, especialmente para todos aquellos que no se sientan muy incómodos con el terror satánico. Un 7,7.