Los actores son buenos, el argumento es bueno, la realización es buena (...) pero tienes la sensación en todo momento de que la película ya la has visto. Todo lo que pasa en la película es previsible y muy estereotipado. La típica clase de chavales que nadie se cree que son estudiantes de verdad; que no quieren someterse a nadie; el profesor con métodos novedosos que se enfrenta a todos; los padres y profesores no entienden lo que hace el profesor y tratan de eliminarlo; y como siempre, consiguen salir siempre adelante (...)

Es el enésimo refrito de la misma película.

Se trata de una película con un argumento muy interesante, con un discurso de autorealización muy bueno, pero que su realización como película deja bastante que desear. Es muy lenta, una técnica de filmación bastante floja, y una resolución de algunas secuencias bastante mala.
Como película, bastante floja; como recurso de realización personal, bastante buena

No es una película de terror, no es de suspense, no es de intriga, es una simple película de borrachos en la que todos los protagonistas se pasan todo el rato alcoholizados. No me extraña que vean efectos extraños, cucarachas por todos lados,... están todos alcoholizados hasta las cejas. No hay escena en la que no estén bebiendo.

El papel de Dakota Johnson bastante patético, se reduce a enseñar el culo y las bragas, ese es su guión y su función en toda la película.

Francamente decepcionante la película, y un rato desperdiciado absurdamente en algo que no aporta absolutamente nada.

Se suele decir que la realidad supera a cualquier ficción, y creo que una película como esta justifica tal verdad, pues al estar basada en una historia real, pone los pelos de punta a cualquiera, pues acostumbramos a ver películas de miedo, de acción o de aventuras, que aunque tengan escenas muy duras nuestro cerebro no es tonto y sabe que son escenas ficticias, no son reales, pero en este caso, es una película que estás viendo y que en realidad todo lo que estos chicos experimentaron en aquella tragedia ha sido real, por lo que cuesta poco ponerse en sus emociones y revivir un drama que sigue siendo algo histórico en la historia del hombre moderno.

Bayona da un excelente recital de cómo dirigir una película, es un orgullo que un director de este nivel sea español y que dirija magistralmente películas tan brillantes como esta.

A modo de crítica, y quizás porque no son actores de fama internacional, me ha pasado que me costaba mucho seguir quien era cada personaje en cada escena y me he tenido que apoyar en la descripción de los personajes de Wikipedia y del accidente del vuelo 571 para seguir qué estaba pasando realmente. Esto, que al principio me ha sido bastante incómodo, al final ha sido todo un acierto, pues me ha permitido valorar aún más la realidad de la cinta que estaba viendo, pues he podido comprobar cómo de fiel estaba siendo la película con el episodio histórico que estaba retratando.

Echo de menos que se haya incluido la escena de Carlos Valeta, que se rodó y se dejó finalmente fuera de la película, pero que se puede ver como escena extra, y que es bastante impactante.

En definitiva, una gran película que merece ser vista y que además pone una vez más al cine español en lo más alto.

Hoy ver una de estas películas no tiene más sentido que para conocer el pasado de los orígenes del cine actual, porque los FX son muy pobres comparados con cualquier película actual, aunque seguro que mucho más meritorios por lo artesanal de todo lo que hacían. Los guiones también son pobres, por lo que tampoco salvan la película. Seamos claros, si hoy se filmara esta película, el resultado sería desastroso, pero tratándose de una película del 1961 y la historia que hay detrás de este film de la productora Dalei que pretendía disputar el trono a la mítica Toho, hacen de la cinta algo memorable para ver.