La película no deja de ser agradable y cuidada. Pero no diré disfrutable. Prefiero, los cortos de Wallace & Groomit, sobre todo aquel en el que se enfrentan al Pinguino criminal, o el anterior. Esos, son obras maestras de la animación, y superan con creces esta cinta.

Si les gustó esta, más lo haran los cortometrajes donde estos simpáticos personajes están en la cumbre del cine animado de final de siglo.

Está película me hizo recordar los ejercicios teatrales que usan algunos directores para luego armar una obra en base a un elemento común. El problema es que para armar este mosaico humano de odio, violencia, frustración y desamor se necesita en primer lugar un guión inteligente al menos, y este es levemente interesante. Con algunas puntas dramáticas que no llevan nunca a elevar el filme a algo más que la media. Quizá la historia del padre cerrajero y su hija. Está bien, es redondita y nada grandilocuente. Y alguna cosita más.

Los actores están bien, aunque no hay ninguna actuación descollante. Puede que Thandie Newton y Peña superen la media de sus compañeros. En cuanto al director, hubiera preferido la mano de alguien que hubiera sido capaz de armar este mosaico de anécdotas humanas con más vibración, y menos cálculo.

Si, eso creo, hay cálculo en la forma como está planteada la película, en la actuación de Matt Dillon, en la Don Cheadle; hay como una apuesta a algo que no termina de cuajar nunca, que no se cree.

No entiendo el Oscar. Ni entiendo ciertas críticas entusiasmadas.

Grand Canyon de Lawrence Kasdan era más inteligente, y aún perdura. Véanla y comparen.

Esta película está hecha con un gran respeto por la inteligencia de la gente. No necesita guiños cómplices para dejarse ver por los adultos. Disfrutable, exquisita, delicada, una historia narrada con extremo rigor. Excelente.

Gracias, Tim.

Lástima. Spielberg no sabe narrar una historia servida en bandeja para hacer algo fantástico. Simplemente, se largó a filmar algo sin poner un segundo de intelecto a la hora de contar una historia. No hubo reflexión, nada.

No dan ganas ni de comentar lo tramposa que es (¿era necesario caer en tantos lugares comunes?. La actuación de Tim Robbins, malísima. Bueno, de Tom Cruise no íbamos a esperar demasiado.

No dan ganas de decir nada. Y, conste que ví el film dos veces, varios meses entre una y otra vez. La segunda vez me gustó un poquitín más. Tal vez, porque esta vez me salió más económica el verla.

La propuesta fue "hagamos una buena película de violencia, sin preocuparnos si tiene sentido o no".

Bien filmada, notablemente narrada. Ya es una película de culto. Diabólicamente entretenida.