Al igual que no puedo ser tan benevolente criticando otras obras de Allen, esta me parece una perfecta alegoría del azar y de la suerte. La película consigue introducirte en una espiral de tensión y desasosiego y rompe con la estructura de la mayoría de los filmes con este tipo de temática.

La película entera y sus referencias al juego son una metáfora redonda sobre como el dónde, el como y el cuando pueden cambiarlo absolutamente todo, y que no todo sucede por una razón concreta, ni en base a una justicia.

La película es buena, los actores son buenos, los escenarios son tan cercanos que te parece estar allí...pero a mi parecer lo más peculiar de todo es la propia historia. El desarrollo. Cada vez estás más tenso, temes que las cosas van a llegar a un punto de no retorno, y de repente pum, estás en otra película, otra persona es la protagonista de la segunda parte de esta historia. Y entonces ya no sabes qué esperar, como terminará. Y eso es una estrategia muy novedosa. La película dura unas 3 h y tu sensación al marchar habrá sido de haber visto hora y media, y eso es señal de que te ha atrapado. El final nos resulta descafeinado a la mayoría, supongo que porque el máximo éxtasis de la película está en la mitad, y no al final, como es habitual.
Es el cine español fuera de su zona de confort. Merece la pena.

Creo que Babylon es la película más infravalorada del año. Ser ninguneada en las entregas de premios no hace más que reafirmar su propósito. Incomodar a ciertos sectores del cine, pero de una manera sutil, mientras se cuenta una historia.

Es una relato de una época de sueños rotos, de transición y cambio. De subida a los cielos y bajada a los abismos, y tú sientes que los acompañas hasta que salen los créditos finales.

Las imágenes son mágicas. La propia fiesta inicial ya te atrapa, y las 3 horas se convierten en una exhalación. Con una Margot Robbie espectacular, una dirección increíble...por primera vez en tiempo tuve en la sala de cine sensación de CINE. De coger las palomitas y estar metido en el universo de la película. Así que en definitiva, te recomiendo verla en la pantalla grande.

Antes de verla las malas críticas me disuadieron un poco, pero finalmente me atreví y, aunque no es que aporte nada tremendamente novedoso al género, la serie te atrapa. El final de cada episodio te deja con unas ganas tremendas de empezar el siguiente. Consigue que dudes un poco de cada uno.

En actuaciones destacaría como muy buena la de Henry, el hijo, y la de Donald Sutherland. Y por el lado contrario, aunque es agradable ver a Hugh Grant salir de su personaje habitual, no te lo acabas de creer. No sé si es el doblaje castellano que te transporta al Hugh Grant de Noting Hill y no ha envejecido con él, o los intentos de chascarrillos que hace en algunos momentos.

Lo mejor: la palpable tensión que hace que te muevas entre la certeza y la duda razonable.

Lo peor: la absoluta indiferencia de todos por la víctima, lo importante era quien lo había hecho, pero el hecho de su muerte parecía prácticamente irrelevante.


Conclusión: Si te aburres y te apetece ver una serie que te atrape, con un buen cuenco de palomitas, es una genial elección.

Sin duda la película más hermosa que he visto jamás. La he visto decenas de veces y cada vez me parece más maravillosa.
Es perfecta la elección de los actores, la música, el argumento...la mezcla del drama, el romance y la comedia.
Acabas desarrollando una simpatía pasmosa por el loco y bueno de Guido y cuando salen los títulos de crédito estás llorando y riendo al mismo tiempo.
Ley doy una puntuación de 10 porque no hay un 11.
Obra maestra.