Primero, las cosas buenas: Estupenda fotografía y bonitas vistas de Estambul, no sólo en el sentido común de la palabra. Muy buena y emocionante banda sonora, guapísima protagonista (me refiero a Renia Louizidou).
Y ahora, las críticas, que son muchas:
Creo que el "romanticísmo de la cocina exótica" ya está demasiado utilizado, demasiado visto y por tanto, ya no convence. Ya lo hemos visto en "Tampopo", en "Como agua para chocolate" y en alguna que otra película más (por cierto, siempre extranjeras) y lo que pasa es que en todas se repiten la "filosofía" gastronómica de ancianos (o mujeres) que relacionan los sentimientos y las pasiones con la comida y con los sabores, etcetera, etcetera. Ya vale. ¿Cuál fué la escena en la que se arrancó de mi garganta ese 'ya vale'?... Pues cuando el abuelo le explica a una chica porqué debería de echarles canela a las albóndigas que les serviría a sus futuros suegros..... Valeeeeeeeeeeeeee yaaaaaaaaaa......

Esta película es malísima, pero, como ocurre casi siempre cuando se trata de Hollywood y de actríces rubias, ¡es muy pretenciosa! Lo cual la hace aún más insoportable. Los norteamericanos deberían de aprender del cine argentino, que sabe llegar al fondo del alma sin ser ni pretencioso ni didáctico, sin citar a ningún poeta ni a ningún filósofo. Y sin guapas excepcionales como protagonistas (sobre todo, cuando se trata de heroinómanas). En fin. una hora y media perdida de mi vida.

No me gusta la mayor parte de las películas de Pedro Almodóvar (Aunque, claro, Almodóvar es un genio y no lo voy a cuestionar)- pero ésta me ha sorprendido por su sencillez- a la vez de ser sofisticada y emocionante. Una mujer desesperada por un amor ya muerto; Dispuesta a cometer cualquier error para tratar de recuperar lo que ya no existe; Ahogada en alcohol y en sus problemas profesionales....Creo que Marisa Paredes merece muchos aplausos por este papel, y los demás actores- también.

Diálogos forzados, pretenciosos y aburridos, actuación lamentable por parte de todos (inclusive los actores conocidos, que no entiendo por qué han aceptado trabajar en esta producción), problemas técnicos (la mitad de lo que dicen los personajes no se entiende). En fin, yo aguanté hasta el minuto 40 más o menos. Mi marido la vio entera pero con la resaca que tuve ayer no estaba para aguantar semejante aburrimiento.
Han sido unos 40 minutos perdidos que no me aportaron nada.

Ni uno de los actores sabe actuar: los diálogos parecen forzados, y los gestos- todo menos auténticos; La fotografía - cutre, y la historia que narra esta película tampoco es fiable. Es demasiado "fantástica"; Como israelí, conozco perféctamente la realidad de esas tierras y os aseguro que es muy poco probable- por no decir imposible- que tras haber asaltado la sucursal de un banco en Cisjordania, puedan los autores del delito escaparse tan alegremente, disfrazados y en un coche con matrícula israelí robada, llegar al mar y disfrutar de unos días viajando sin problemas por todo Israel. También hay un "agujero negro" en la historia: El amigo que acompaña a la pareja se desaparece sin ninguna explicación: De repente se encuentran Soraya y su chico solos. Muy raro. Y, por si fuera poco- los subtítulos en español son horrorosos. Se nota que los hizo alguien que si bien domina el árabe, no tiene ni idea de castellano, cosa que lo dificulta todo aún más..... En fin, no recomendaría esta película a nadie. Es malísima.