Pues sí; vale, es una película necesaria, y es una buena película: tiene muy buen ritmo, un gran montaje y los actores estan a la altura, pero: Catapum, si la mides con otras, no acabas de entender porqué es la mejor película del año. Spotlight és una buena película, se sigue bien y se deja ver, pero no va mucho más allá; deja buen sabor de boca pero no emociona lo suficiente y cuando lo pretende es usando una demagogia innecesaria. Una cosa es la historia y otra los historiadores.

Quizás una de las virtudes de esta película sea que conmueve no por sus diálogos sinó por como es capaz de expresarlos a través de la música. Un juego peligroso que hace que aveces el argumento parezca un poco forzado, pero en conjunto las piezas se ajustan debidamente, y el resultado, sin ser excelente, consigue apaciguar las aguas turbulentas en las que se desarrolla el argumento. Una película complicada emocionalmente, pero que equilibra y compensa sus carencias con una estimulante banda sonora.

Película cruel, dolorosa, amarga, estúpida y sucia que solo muestra dolor y dolor, sin esperanza ni mensaje, sin sentido, sin norte, sin nada. Si pretende mostrar algo; no lo consigue. Y si pretende concienciar de algo; se tuerce desde el principio. Totalmente innecesaria. (en serio es de Dinamarca?)

Habitación (el "La" es definitivamente un error) puede gustar o dejar indiferente, tiene ese don para llegar del todo o dejarte frio. Personalmente y aunque la subjetividad se subestime, me he encontrado con una grandísima película. La dirección es esplendida, los actores te rompen, y el montaje te conduce; te orienta y te situa en cada momento donde debes estar. Tecnicamente ni pretende ni necesita nada, y la historia, aunque insinua mucho (sobretodo para los que hemos leido el libro) se basta y se sobra.
Una película que cada vez que se vuelve a ver te da algo más, que crece en detalles insignificantes y que precisamente en esa sutileza estimulante, te envuelve en una historia que hace de la "sencillez" de la barbaria humana un homenaje a la grandeza de la capacidad humana para el amor en las circunstáncias más inesperadas. Una peliculaza, en definitiva, de las que sinó las has visto, no te puedes considerar un verdadero amante del cine.