El inicio de la película es bastante esperanzador. Una buena trama que puede desarrollarse con más o menos calidad, unos personajes que parece que van a cumplir con nota aceptable, una gran variedad de situaciones con respecto a la edad de los personajes y su condición social.

Pero de repente… torna el argumento a una película de quinceañeros y todo se va al traste.
Cuestiones de matrimonio tratadas por personas de 30 años, la paternidad, la idea de formar una familia. No creo que sean temas que deban desarrollarse bajo un prisma tan simplista como los líos de faldas que tienen los protagonistas masculinos.

La última parte de la película gira hacia unos líos y unas situaciones que desmerecen el planteamiento inicial.

Dejando al margen las buenas interpretaciones, lo que destaca de la película, es lo que todos ya saben; su excelente fotografía.
Se podría mencionar el buen papel de Hanks, incluso el de Newman, pero todo eso es secundario ante el perfecto ambiente sórdido de oscuridad en el que se desarrolla la mayor parte del largometraje.
Un vestuario de mucha calidad, poder alcanzar ese perfecto estado de recreación de los años 30´ es todo un logro.

Ví la película hace ya tiempo, en una fria noche de invierno de un oscuro sabado. Pero después todo fue luz.
Imponente interpretación de Gwyneth Paltrow así como de Ethan Hawke.
La trama es esplendida, profunda y plácida. El largo periódo de tiempo por el que transcurre la película hace poder ir conociendo a los personas, sus fobias, sus logros, sus sensaciones.
Entrañable historia, muy recomendable para los admiradores de la Paltrow.

Una más de Rohmer y es la tercera que veo. Pero a este paso necesitaré ver todas.
Un historia sumamente interesante, te deja con la sensación continua de creer que el protagonista masculino está metiendo la pata, la película hace conectar con quien la ve.
Muy bien tratado los aspectos amorosos frente a los meramente amistosos, intenta aclarar con largos diálogos la difícil relación que puede haber entre hombres y mujer.
Por cierto, claramente me quedo con MARGOT.

No suelo suspender películas salvo que sean un desastroso fiasco. Esta concretamente ha estado a punto de lograr eso, pero creo que siempre se debe reconocer el mérito y el trabajo de todos los profesionales.

Lo cierto es que la película navega por un desierto similar a los existentes en Kenya. Desde el minuto uno hasta el final no se entiende muy bien que es lo que se nos pretende transmitir. Además la supuesta historia de amor que nos plantean es algo irreal. Pues quién puede pensar que una rubia como la protagonista va a pasar desapercibida en el corazón de África. Es absurdo. Un amor tan tópico (y me refiero al hecho de que ella se sorprenda por cada cosa y acción que le sucede, sin darse cuenta donde está) parece no tener lógica alguna. Y si el romanticismo de la película reside en ese amor ilógico, conmigo han conseguido el desconcierto total.