A Spike Lee le bastó un sólo día de tiempo de ficción para montar esta película. Da la sensación de que en ese lapso de tiempo, pasan pocas cosas, aunque la película mantiene una intensidad alta durante la mayor parte del metraje.

Monty (Norton) mantiene una dura pugna psicológica consigo mismo, de la que brota un sentimiento de culpabilidad ligado a un pánico que se apodera de él por su inminente ingreso en prisión. Esta pugna es la que le da vida a la cinta.

El valor de la amistad está muy presente en "La última noche". Los personajes se muestran tal y como son. Esconden pocas cosas. Aunque sus historias paralelas quedan algo inconclusas. Y eso decepciona. También encontramos incertidumbre en el argumento. Parece ser que alguien ha traicionado a Monty, y en mi opinión la respuesta a esta duda se resuelve precipitadamente y parece no dejarnos satisfechos.

Concluyendo diría que la figura de Edward Norton siempre brilla, aunque esta vez nos acompaña en una historia que desprende el sabor de un buen plato, mal condimentado.

El sexo como filosofía de vida. Ese podría ser el tema de esta película. Hoy en día no es fácil encontrar historias originales para el cine, nuevas psicologías en los personajes. "Val" es una chica distinta a las demás. Es adicta al sexo, y eso hace que sus principios y valores no sean como los de las demás mujeres. Al igual que el cleptómano siente deseo por robar, aún sin tener necesidad, a la ninfómana le ocurre con el sexo. No lo puede evitar y ello le comporta nuevas sensaciones, sentimientos contradictorios y mucho deseo. "Val" realiza un intento fallido por ser como las demás, por ser lo que no es. Esa lucha interna es el esqueleto de la cinta, y le llevará indagar a base de vivencias, hasta encontrar una respuesta con sentido.

La película tiene un comienzo desalentador, demasiado sexo explícito, redundante. Esto sucede en los primeros 15 minutos, en un aparente deseo de perfilar el personaje con escenas de cama, aunque no lo consigue en este tramo. Más bien conocemos la verdadera perspectiva de esta adicta al sexo cuando inicia la búsqueda de una vida "normal" y se choca con los obstáculos para conseguirlos. Quiere ir contranatura, al final debe descubrir la moraleja anticipada por su abuela: no se puede ser feliz sin ser uno mismo.

La historia es muy creible, avanza con firmeza, y tiene momentos muy dramáticos. En especial destacaría sus vivencias en el prostíbulo, donde se nos muestra ese mundo con crudeza, y dibujando personajes con realismo y verosimilitud.

Hablar de "La extraña que hay en ti" es hablar del dilema moral que entraña dicha cinta. Te hará reflexionar y posicionarte en un sentido u otro. El dilema se escurre en una delgada línea entre la Justicia y los sentimientos. Quizás el primer concepto se desvanece para las víctimas de asesinatos, terrorismo u otras atrocidades, en las cuales el sentimiento de venganza es más fuerte. Es una película para ver desde diferente prismas, y desde ambos las cosas se ven con nitidez, aunque lógicamente de lugar a todo tipo de opiniones.

De nuevo Jodie Foster en un papel de tipa fuerte, masculinizada, y que tiene que atravesar por difíciles adversidades. Un personaje que evoluciona ante los sucesos que se le presentan, pero que no da un paso atras sino varios hacia delante. Impresiona como se endurece, en momentos en los que a uno ya le da igual todo. También llama la atención el nuevo rol que se le da a la mujer como víctima.

En mi opinión una historia de amor más intensa en el principio del film hubiera provocado después un impacto aún más fuerte, y hubiera legitimado más si cabe las acciones de la protagonista. Pese a todo estamos ante una gran película, completa, de las que hacen pensar y dan lugar a debates.

Extraordinaria la banda sonora, y aterrante la imagen que se nos queda de la ciudad de Nueva York, una ciudad en la que pasear parece convertirse en una cuestión de vida o muerte.

Cuando ves esta película te entran ganas de irte de vacaciones, da igual en el mes que vivas, con tal de perderte un tiempo, y dejar atras monotonía y algunas otras malas sensaciones. Es una "peli" divertida, llena de personajes bondadosos, donde el amor es protagonista. Se trata de dos historias paralelas bien compensadas en cuanto a interés, una en las afueras de Londres y otra en la glamurosa Los Ángeles. A pesar de que consigue tocar la fibra sensible del espectador en algunas ocasiones, en otras muestra situaciones demasiado idílicas, de esas que sólo suceden en la ficción.

Me parece una película histórica buena, y sin demasiados alardes. Resume de forma sencilla y concreta el momento religioso, lo cual es de agradecer. Me llamó la atención el claro posicionamiento en contra de la iglesia conservadora, en todos sus órdenes, y el encumbramiento como héroe de la figura de Lutero, lo cual es comprensibe teniendo en cuenta las organizaciones que financiaron el filme. Buen argumento, aunque en algunos momentos la aparición de algunos personajes mal definidos y presentados, me provocó algo de confusión.