Guillermo del Toro se supera película a película. Es increíble lo que se puede hacer si se tiene imaginación y buen gusto al llevar a cabo lo que la imaginación te dicta. Una auténtica maravilla que nos demuestra lo torpe que ha andado España al llevarse Volver a los Oscar (afan continuista…) y no apoyar esta genialidad. Desde la dirección, pasando por la fotografía, los colores, la ambientación, el hecho de situarla en la Guerra Civil (ya está uno harto de películas de la época, pero situadas siempre siempre en la 2ª GM)…

Salí del cine maravillado, y eso hoy día es muy raro. Sobre todo en el cine hispano. En esta película se demuestra que se pueden exprimir a los actores para que den lo mejor de sí (extraordinaria Maribel Verdú, no me lo esperaba para nada). Caso aparte es Sergi López que es de largo, el mejor actor español del momento, y él solito construye un villano creíble, duro y carismático.

Véanla. ¿A qué esperan?

Tras la magnífica Conan el Bárbaro (obra magna de John Milius), el cine de aventuras de espada y brujería eclosionó, dando lugar a muchas películas mediocres, y otras no tanto, y abriendo el camino a películas como El Señor De Los Anillos.

Y desde ese Conan, hasta este Guía del desfiladero, ha pasado tiempo, demasiado, pero Marcus Nispel (director del excelente remake de La Matanza de Texas) ha aportado su devastadora personalidad tras la cámara, creando una auténtica maravilla de film de aventuras, con un Karl Urban muy carismático y donde constantemente se hace referencia a clásicos como Acorralado o la reciente Apocalypto.

Hacía tiempo que no se estrenaba una película tan buena de estas características. No pierdan la oportunidad.