Estamos ante otro despropósito de cinta, otra película más en la los americanos se encargan de estropear lo que era para mí y seguro que para la gente de mi edad una serie de Tv bastante entretenida y divertida. No es la primera vez, ya lo han hecho con Starsky y Hutch, una serie policíaca que la convirtieron en una absurda comedia, los angeles de Charlie y próximamente el Equipo A. La serie en cuestión era Los Duke de Hazzard, serie que emitía en España Tele 5 en sus inicios y que aquí era desconocida. Seguía cuando podía la serie y por este motivo di el paso, sabía que no iba a ser buena idea, de ver la película. El resultado, pues una película sin gracia, con chistes malos (normal con Johnny Knoxville) e interpretes lamentables que no tiene nada que ver con la serie. Penoso Burt Reynolds. Como consuelo espectacular Jessica Simpson en el papel de la prima Daysi ( espectacular físicamente hablando por su puesto).
De la precuela que salió posteriormente, mejor ni hablar........

Es una película que francamente me ha decepcionado. Se repite el proceder de Alex de la Iglesia, un principio espectacular, original, que te engancha, pero desgraciadamente y últimamente se repite demasiado en Alex de la Iglesa, a partir del minuto 45 la película va perdiendo toda la frescura y originalidad para convertirse en algo absolutamente vulgar e inverosímil. Alex de la Iglesia no sabe cerrar sus historias, los finales de sus películas no están a la altura de los principios, es un gran contador de historias pero un nefasto finalizador de las mismas. Esto se repite desde La comunidad, Crimen ferpecto y por supuesto balada triste. Los finales de sus historias no están en concordancia con los geniales principios.
Este señor va complicando las historias sobre la marcha, lo que hace muy difícil que tengan un final factible y por eso, últimamente sus películas han dejado de gustarme tanto.
Admirador de Tarantino, debería aprender de él como acaba sus historias.

Recomendada por un amigo al que le encantan las rarezas, tengo que decir que es la peor película que he visto en mucho tiempo, y sin duda entre las diez peores que he visto en mi vida. Es el ejemplo perfecto de película pretenciosa, guión absurdo, denigrante para la protagonista e incluso de mal gusto. No la salvan ni los actores principales. Dos horas de mi vida perdida.