Bellísima historia, llena de verdad, de sueños, de tonterías propias de la edad (de qué edad?), pero con personajes reales, auténticos, creíbles al cien por cien. Tanta basura hollywoodense nos vende historias y personajes estereotipados y ridículos, que es increíble como esta pequeña joyita quedó casi en el olvido. El trío protagonista se mete sencillamente en la piel de nosotros, el malogrado River Phoenix, la exquisita Samantha Mathis y personalmente, Dermont Mulroney creo que está excelente, además de cantar sus propias canciones.

Joya. Una caricia para el alma. Un Nino Manfredi que conmueve en cada escena, un trabajo monstruoso realmente, y un Alfredo Landa, como dicen por allí, que siempre cumple (será esa la definición de buen actor?). Y si no hubiera muerto? Y con tan poco se pudiera hacer una historia tan bella. Imperdible.

El bueno de Parker se mete con uno de los temas más vergonzosos de los Estados Unidos, como es la pena de muerte. Y lo hace con un thriller realmente impactante, donde nunca terminan las sorpresas. Sostenido por actuaciones realmente de primera, algunas mentes simples critican un cierto recurso que parecería de cine clase B, sin ver que, justamente, alguien como Parker no podría caer tan bajo, y si eso esta puesto allí, está puesto a propósito, y al ser tan ridículamente irónico, se convierte en una parte más de la argumentación.

Alguien me puede explicar como esta colección de escenas inconexas, de diálogos ridículos, de situaciones absurdas y mal llevadas además, cómo toda esta ridiculez puede ser tomada como una auténtica representación de la soledad, el dolor y todo lo que se les ocurra? Es apenas un disparate soporífero, con algunas cositas lindas, mínimas, pero... no vale nada. "Esto" 7 puntos? Por dios!!!!!!!!!!!!

Personalmente, no entiendo como esta película no ha sido rescatada por más público, incluso su similar alemana de muchos años después, tiene más vistas y hasta este algo mejor calificado. Todavía me debo la visión de la otra, pero esta versión, sea real la historia o no, es magníficamente recreada por un director que realmente sabe lo que hace, cuenta con un reparto de excepción, con una Liv Ullmann que está a la altura de sus mejores papeles, aún con el maestro Bergman, y todo un reparto de figuras de excepción, hasta con un Franco Nero más que correcto. La historia esta brillantemente narrada, y cuenta con momentos de impresionante intensidad y emotividad, manejados por una mano verdaderamente maestra.