Ryan Gosling y Emily Blunt, están más perdidos que un burro en un garaje, sobre todo ella. Esto debe ser una de las denominadas "películas alimenticias" que este tipo de actores hacen para tener calderilla para sus gastos.

Es medio entretenida y sumamente larga, para no contar nada. Las películas no se infravaloran en filmaffinity, se infravaloran ellas solas.
Es más simple que el mecanismo de un chupete y en 126 minutos hay dos o a lo sumo, tres chistes que merecen la pena y hacen una gracia relativa, todo lo demás está muy visto y además en algunos casos mal hecho y peor filmado.
Ahora bien, si te ríes con chistes como ese de que dice: "era un perro que se llamaba chiste, se murió el perro y se acabó el chiste" entonces te parece que en filmaffinity se infravaloran las películas.

Hay maneras más elegantes y entretenidas de rendir homenaje a los especialistas sin estar 126 minutos mareando la perdiz.

Leo algunas críticas profesionales y me quedo con la boca abierta. Tengo muy claro que no sé de cine tanto como estos críticos presuntamente profesionales, pero también tengo claro que este peli no pasa ni primero de cinéfilo aficionado, me explico:

- No sabemos por qué están en guerra, presuntamente el presidente es muy malo y ha disuelto una famosa agencia policiaca de EE.UU., pero insisto, no sabemos por qué, ni como, ni cuando.
- Cuando nos presenta a los personajes, está claro cual va a ser el rol de cada uno e incluso cuando avanza unos pocos minutos la peli, sabes hasta quién va a palmar, sin lugar a dudas.
- ¿Quién, por el amor de Dios, suministra vestidos nuevos y mercancías al idílico pueblo si todo el país está en guerra y las carreteras cortadas? En el interior de la tienda se produce una de las escenas más tontas de la película y en el exterior, el periodista veterano que cumple con la cuota de cuerpos no normativos, metido con calzador (literalmente) en el guion y en el 4X4, da muestras de su sabiduría, jajaja.
- La escena de las ventanillas del coche solo se entiende para justificar lo que explico a continuación.
- Como tienen que cumplir con la ideología woke, nos meten dos personajes foráneos para que los supremacistas blancos hagan de las suyas, sin hacer mucho destrozo. Blanco, rubio y se ven los ojos azules detrás de esas estrambóticas gafas rojas, con ropa mimética, of course.
-Hay escenas que están ahí para mostrar violencia gratuita, me gustaría saber qué quiere contar el director con ellas, el contexto es el mismo, pero la escena es diferente.
- La "banda sonora" jajaja.
- A parte de los 15 últimos minutos de película, no vemos la guerra, propiamente dicha, por ningún lado.
- Cuando vemos la guerra, el ejército presuntamente rebelde, está mejor pertrechado que el regular, la escena del Chinook levantando un Humvee es de las que tampoco se entienden. Como tampoco se entiende que un M1 pase por encima de una barricada de coches con el conductor asomando la cabeza por la escotilla de la cámara de conducción, jajaja.
- La traca final es más que previsible y me da la sensación de que los periodistas van demasiado empotrados en el pelotón que asalta la residencia, creo que les ha faltado asesoramiento en la producción.
En resumidas cuentas: una road movie sobre la inconsciencia criminal de una postadolescente con restos del pavo que cuesta cuatro vidas, porque ella lo vale.
La peli es una sucesión de escenas deslavazadas que algunas se justifican con otras y las demás, están ahí para intentar contarnos algo pero creo que el director no sabe muy bien qué.

Menos mal que no fui a verla al cine.

Aún no se ha hecho una película sobre DUNE que haga justicia a la excelente serie de libros originales. Las dos películas de Denis Villeneuve no son mejores que la de David Lynch, simplemente sus efectos especiales son más modernos. Los protagonistas, woke y anoréxicos, serán un referente para la generación actual. A los que tenemos una cierta edad nos parecen unas cositas blandas que de ninguna manera representan el coraje, el honor y el liderazgo que muestra Paul Atreides en la novela.

Aún así, entretiene y no termina de aburrir. Como la primera parte.

Sherlock Holmes con falda y con la capacidad de abstracción de Leonardo Davinci en Davinci Demons, un doctor Watson de 1,93 de altura y gordo (fuerte según él), la señora Hudson haciendo tortilla de patatas y chipirones... Moriarty tan listo como siempre y les sale la adaptación de un libro que ha vendido 3,5 millones de copias y que la protagonista dice que se inspiraba en los perros cuando ponía cara de pensar, que me lo expliquen.

Eso sí, se puede ver y entretiene.

Explican y exponen muy bien las mentiras y matanzas de este matarife, en muchos casos ayudado por los medios de comunicación.

Nos cuentan hasta donde puede llegar un criminal incompetente apoyado y tapado por el corporativismo médico, llegando a tapar auténticas carnicerías para salvar sus culos y yéndose todos ellos prácticamente de rositas.
Vemos también las consecuencias que puede tener a nivel personal y profesional ir contra la verdad establecida sacando a la luz la verdad verdadera.

También nos cuenta hasta donde la gente es capaz de dejarse engañar por alguien bien parecido.

Se ve de un tirón.