- Las escenas de las batallas con la sangre de color rojo claro, que parece más bien tomate son bastante malas para tratarse del año 92.

Cito un par de ejemplos de cosas que me han parecido absurdas, ilógicas, contradictorias...

- El "lupas" chantajea al protagonista en más de una ocasión, le saca las perras, le traiciona, se burla de el, uno piensa que es un cabrón, y luego llega otro dia y se comporta como un verdadero amigo. Al final el personaje no resulta creíble. Por cierto que yo en lugar del protagonista a la segunda vez que me chantajeara así lo mandaba a la mierda.

- El protagonista engaña constantemente a la chica, primero va detrás de ella por atracción sexual, luego dice que se enamora, vale, hasta ahí lo veo creíble, podría ser una evolución lógica en un niño de 14 años, y hubiera dado para un buen guión esa idea, un chaval que empieza encoñándose y luego descubre el amor de verdad. Pero cuando vi el final, donde va con un billete "to" serio a decirle que quiere acostarse con ella como cliente, se me cayeron los palos del sombrajo. Estás empatizando con el pobre chaval, que se ha enamorado puramente de la chica y le han hecho daño, y va al final y hace eso. No resulta lógico. Cualquier chaval de 14 años con un mínimo de sentimientos, que saliera dolido de ver que la chica de la que está enamorado es una prostituta, y que ve que casi se acuesta con uno delante de el, jamás haría eso (no sé vosotros, pero yo me imagino a mis 14 años pasar por algo así y sería tan traumático que no estaría para esas cosas). Vale que al final no se acuestan, pero todo me resulta muy contradictorio y sin sentido.

- La chica a veces parece buena y sensible, a veces fría, como cuando le dice que "no diga tonterías" cuando el chaval se le declara, no sé pero a mi eso no me pega con como te la mostraban al principio. Y al final resulta que sale de prostituta borracha y golfa a la que no parece importarle lo más mínimo hacer daño a los sentimientos de un chaval, pretendiendo acostarse con un cliente delante de el. Luego acepta lo de acostarse con el chaval por dinero, luego dice que no puede... A ver si nos aclaramos. Otro personaje poco consistente.

Es el defecto más gordo que le veo a esta película. Cada personaje parece como 2 o 3 personas distintas en según que tramos de la historia. No tienen una personalidad consistente y fija. Parece como que el director juega con ellos según la escena que quiera hacer, y eso se carga bastante el resultado final. El "lupas", ¿un cabrón oportunista? ¿un buen amigo? El protagonista, ¿un chaval sensible y cariñoso? ¿un niñato salido, mentiroso y cabrón? ¿un oportunista pajillero e insensible? La chica, ¿una furcia a la que no le importan los sentimientos del chaval? ¿una buena chica comprensiva?

Hace aguas por muchos lados.

Todo eso no existe en esta adaptación. Quitarle lo crudo, lo tenebroso, lo violento, lo salvaje, lo sangriento, lo fantasmal a esta historia, y añadirle ese toque idílico que tiene la película, es como quitarle la sal a una ensalada, y añadirle azúcar dulzón y pegajoso. La empalagosa banda sonora va acompañando las escenas pasteleras y ultra-coloridas, creando una atmósfera infantil en plan "para todos los públicos", que en mi opinión, destroza el conjunto totalmente. Sólo un ambiente crudo como el del "anime" "Ninja Scroll" (que aunque nada tiene que ver con Musashi, refleja perfectamente su mundo oscuro y sangriento), hubiera salvado esta película (al menos en lo estético), puesto que en el libro son frecuentes frases como "el brazo mutilado calló al suelo como un rábano blanco", "la sangre salpicó manchando las hojas del bosque", etc... Pero en lugar de eso tenemos un film políticamente correcto y comercial, sin sangre, sin desmembramientos, sin cortes de espada reales, que no hace sentir nada al espectador, nada de lo que el libro sí te hace sentir.

Por supuesto, no es la violencia lo único que le falta. Por si fuera poco, casi todas las reflexiones filosóficas de carácter profundo sobre la vida que va haciendo el protagonista a lo largo del desarrollo de la historia, no aparecen por ningún lado.

Ya le hemos quitado a la novela dos de sus más importantes características: Su atmósfera lúgubre y sangrienta, y su esencia filosófica. O en otras palabras, le hemos quitado su aspecto exterior y su contenido. ¿Qué nos queda pues? La respuesta se la dejo al lector.

Y ya añadiendo otra cosa que me resta puntos a esta película... ¡Pero por favor! ¿¡A quién coño se le ocurrió meter a Toshirô Mifune con sus 36 tacos (aunque aparenta mas) y con esa vozarraca gutural de camionero de Miyamoto Musashi!? Musashi era un crio de menos de 25 durante gran parte de la novela, no era un tiarrón con pinta de Toranaga ("Shôgun"), papel que sí le pegaba al bueno de Mifune, pero este de Musashi no le pega ni con cola. Sé que a muchos os parece buen actor (a mi personalmente no me gusta mucho, entre otras cosas porque no vocaliza bien, habla muy para adentro, supongo que obsesionado con dar la imagen de "machote japonés samurai", y no se le entiende una mierda), pero gustos aparte, este papel no le va, seamos sinceros. Es otra cosa que arruina completamente esta adaptación de la famosa novela.

Soy consciente de que un libro como este, es muy difícil de llevar a la gran pantalla, pero aún así, esta adaptación me parece de lo peorcito que se ha hecho. No me importa nada ni el año en que se rodó, ni lo endiosado que esté Mifune, sería una falta de respeto a la novela valorar esto con mas de un 2.