Me esperaba mucho más de esta cinta que ni de lejos tiene entidad para haberle "robado" el oscar a "La La Land", que por otra parte tampoco la considero nada memorable. Esta es lenta de forma innecesaria y hasta desesperar, previsible por momentos, aunque con un modo de filmar sin duda original y con actuaciones brillantes. No gran cosa, la verdad.

Los críticos seguidistas y ramplones vuelven a llenar de elogios una película que no lo merece. Las buenas interpretaciones de los dos protas, sobre todo Brad Pitt no levantan una película que aunque tiene escenas chulas no funciona casi nunca, innecesariamente lenta y larga, sin gracia ni ritmo, que incluso por momentos se hace aburrida y previsible. La peor peli de Tarantino con diferencia y, para colmo, efectivamente, la escena de Bruce Lee resulta indignante.

Un western moderno con dos forajidos a sus anchas y un sheriff a la caza y captura al que solo le falta mascar tabaco. Una historia no muy original que digamos y a la que le falta más densidad y profundidad. Geniales el trío de protagonistas, con el gran Jeff Bridges a la cabeza. Por cierto, lo del título que le han dado en español.. ya les vale.

En general, complicar por complicar es algo que no debe ser camino en la vida, ni en el cine. Lo más resaltable de esta película es eso, lo complicada de entender que es. Lo único reseñable es el efectismo del movimiento inverso dando lugar a escenas no vistas anteriormente, pero poco más. Es decir, si a la película le quitamos esto y el relío argumental resulta una peli más de acción, de segunda o tercera categoría.

La película es lenta -cosa no rara siendo argentina- pero sabe mantener la tensión y la incertidumbre para finalmente resolver la historia sin decepcionar y de forma creíble, lo que acostumbrados a la previsibilidad y el estúpido rebuscamiento hollywoodiense es mucho decir y se agradece. Si a eso añadimos que en la peli están Luppi y Darín el resultado es que hay que verla sí o sí.