Muchos reportajes por la tele, tráileres con estética Sin City. La cosa prometía.

Empieza la película y el monólogo en off, ya ni te lo crees (mi ciudad, mi amada, mi ciudad me posee) y el resto es aburrido hasta tal punto que miras el reloj cinco veces deseando que se termine e irte a casita.

Méndez y Johansson no les pidas mucho más que lucir palmito. El tío que hace de Spirit justito y Paz Vega, me dio vergüenza ajena, con el rollo ese de latina exótica enseñando tetas. ¡Horrible! mejor que se quede en España.

Crees que la película estará a la altura de Sin City, pero es un fiasco total, fallan cosas como la coherencia visual (la sangre tomate, la suela de las zapatillas blancas, primero no se ve la cara a Spirit, luego se le ve... después un ratillo de blanco y negro)
¿Disfraces de nazis? Por no hablar de los calvos andaluces (otro momento de vergüenza ajena)

No la salva ni Samuel L Jackson.

Mezcla el típico friki que no se jala ni un rosco empleado de una tienda de informática; un hermano de Alec Baldwin (oh noo por favor) más el amigo pesado del protagonista, que resulta ser más friki y simpático que éste; guiones super flipados, pero que los guionistas ya no pretenden que te los tomes en serio; una espía florero super lista y super buena que le hace tilín el friki del principio; algún chiste rayando lo malo y (tachán) eso es Chuck.

La olvidas en el momento que te levantas del sofá.

Ah y en USA el friki ese está en el top 10 de los personajes con más sex-appeal… pues vale.