No, no es otra película de romance ni una loca película de risa, más bien es una invitación para reflexionar sobre valores tan importantes como el respeto y tolerancia a los adultos mayores, las dificultades que conlleva el adaptarse a un mundo tan impersonal, y la aceptación social de la inversión de roles en una familia actual. Cierto es que no es la mejor película de Anne Hathaway ni mucho menos la de Robert De Niro, pero juntos logran una atmósfera de encanto y complicidad.

Estéticamente está bien lograda, la actuación de Álvaro Guerrero es buena, pero la historia es muy endeble. Trata de ser nostálgica y termina rayando en lo decadente y absurdo. Sólo queda en otra película más de un cine mexicano que no logra levantar. Lo mejor de esta propuesta es la luz en el rostro de Andrea Chaparro. Recuerda al encanto que tuviera en su momento Maya Zapata.

Es una gran serie. Da gusto ver un producto hecho con esta calidad y con estos talentos. Naian demuestra, una vez más, que es una actriz capaz de proyectar todo tipo de emociones, además de que su encanto llena la pantalla una y otra vez. Sebastián, tal vez no sea el tipo más agraciado o talentoso, pero su papel es el de retratar, fielmente, al típico cliché del habitante de La Condesa. La música, la gracia, la fotografía, los detalles finos de esta serie son dignos contemplarse y, tal vez, volverse a ver.

Sentí emoción cuando vi que habían hecho una "segunda parte" de "Un padre no tan padre", aquella película que en 2016 uniera a mi familia y hasta nos hiciera sentirnos nostálgicos con nuestros abuelitos y padres, pero esta segunda parte está muy lejos de lograr cautivar al espectador. Olvídate de ver el desarrollo de aquellos personajes entrañables que nos entregó la primera parte, ahora todo se centra Héctor Bonilla y Angélica María que, claro está, es un agasajo verlos juntos, pero el entorno de la película es sosa, floja, en ningún momento logra esa chispa que tuvo la primera.

Si quieres sentir un poquito de pena ajena, esta película es para ti. A no ser, claro, que seas amigo o conocido de los que salgan en la película (porque obvio, sus amigos y conocidos, incluso ellos mismos serán los únicos que se alegrarán de participar en una película que parece más un proyecto escolar que un producto terminado. Lamento mucho que Diana Bovio haga una película así, sin gracia alguna, la película, no ella. Ella, en todo caso, será lo más agradable que veras en pantalla.