Horriblemente mala. Llena de tópicos, escenas previsibles y un nulo sentido del terror y el suspense, Mike Figgis "logra" un enorme montón de mierda fílmica, donde Dennis Quaid está más inexpresivo que nunca. Cuando terminas de ver la película te entran ganas de buscar al director y pegarle con un calcetín sudado en la boca por haber hecho esta bazofia con la que tima a todo el mundo. Si no tienen nada que ver, aún así, no la vean.

Una gran película coral de humor negro, acción videoclipera, violencia splatter y personajes delirantes. Genial Jason Statham y Brad Pitt como gitano irlandés. Esta película es la consagración definitiva de Guy Ritchie, el Tarantino anglosajón.

Vamos a ver, yo soy un gran fan de la saga "Posesión infernal", y esta, su primera entrega, para mí es la peor. Lo único salvable son el inquietante final y que los zombis en algún momento dan algo de yuyu. Se acabó. Esta llena de tópicos, los efectos especiales son ridículos y el guión insustancial. Pero lo peor es el maquillaje. Yo hace 2 años rodé una peli malísima de terror patético con unos amigotes y los maquillajes que nosotros hicimos eran de Tom Savini comparados con los de este film. Eso sí, es un bodrio, pero muy respetable.

Muy buena película de James Cameron, en la que mezcla acción adrenalínitica de agentes secretos con comedia de enredo. Es imposible aburrirse en algún momento. Si no la habéis visto, no sé a qué esperáis.

P.D: Genial el striptease de Jamie Lee Curtis.

Divertida y original comedia que no decepciona. El prólogo es bueno, con el viejo diciéndole que no se meta en asuntos de putas, niños, riñas matrimoniales y apuestas (todo en lo que se acaba metiendo) La primera historia es una pequeña chorrada, y tiene varias secuencias absurdas y sin sentido, pero sirve para que conozcas al botones Ted y tiene algún buen punto. La segunda historia es un poco rara, y apenas hay humor en ella (excepto en el momento en el que le vomitan al botones encima) y predomina más el thriller. Luego llega la tercera historia, la mejor. Se podría dividir en dos partes, la primera es una historia de niños (no para niños) con pequeñas y buenas dosis de mala baba. Y la segunda es pura histeria cómica, con el botones histérico, al que le clavan una aguja, fuego en la habitación, un cadáver.... Desternillante. Acto seguido viene la mejor secuencia, en la que el botones, más alterado que nunca, llama a casa de su jefa y le coge el teléfono una fumada. Y por último viene la historia de Tarantino, con sus habituales referentes: cultura pop, humor negro, palabrotas y autorreferencias. Y termina la película, con un gran final acompañado de la canción "Vertigogo". Muy buena.