Una delicia, este atípico mediometraje del gran maestro Welles.
Pura poesía, nostalgia y pasión en una desgarrada historia de amor rodada con melancolía y una gran belleza visual.
Para mí, que siempre fui el raro de mis amigos, se trata de lo mejor del director (ex-aequo con la preciosa "Campanadas a media noche".
No es fácil poder verla pero, si se cruza en tu vida un día, no lo dudes y disfrútala.

Buena secuela, bien narrada y con trepidantes escenas de acción.
Película comercial, pero de calidad. Muy entretenida y con un fondo ecologista-pacifista que la hace muy recomendable.

Un apasionado homenaje al cine.
Innovador y experimental documental sobre el ciclo de la vida, del ser humano como ser social, de la vertiginosa vida de la ciudad que no descansa.
La curiosa cámara de cine observa y es observada cómo observa. Fascinante. Bellísima. Un regalo, si amas el cine.