Qué tontería es reivindicar historias inventadas, que no van a ningún sitio, sobre alguien con una historia muy interesante de por si.
La película es fría y no añade nade a una relación que pudo o no suceder, y que no interesa a nadie. Las actrices, que son magníficas, no transmiten nada, pero vamos, que hay que lucirlas en el rollo lésbico, cuando lo que interesa va por otro lado.
El que quiera una película preciosa sobre la intensidad del amor, que vea Carol, y no esta "boutade".

Hubo una primera película, de Anthony Minghella, que no era ni comedia ni drama (Un marido para mi mujer). Insustancial y sosa, ligeramente agradable. Luego una argentina y otra brasileña, las tres con unas ganas terribles de hablar sin nada que decir, cerca de la nada absoluta.

Ya en el colmo de la imaginación, pongamos actores con un cierto tirón y profesionalidad (solo cierto, luego hay que construir un guión y dirigirlos, claro), y ya está, ¡eureka!, un medio remake español.

¿Para qué tanta mediocridad?

Que si el argumento está mil veces visto, que si Tom Hardy se pasa la peli resoplando, que si hay momentos un poco ridículos (lo de los hijos), que si no desarrolla los papeles y Olyphant y Forest merecían más, que si el guion tiene fallos y la abuela fuma ...

Gareth Evans totalmente disparado, al que le guste (yo no soy fan del cine iraní precisamente) la va a disfrutar de lo lindo.

Dicen que solo tiene un par de escenas de acción, ¡pero son toda la película!, y la de la discoteca es tremenda, con una planificación descomunal.

Vamos, que bla bla bla, pero yo no he parado de disfrutar.

Qué pena me da que Walter Hill vaya acabando así. El desaliño formal es patente. Se trata de una sucesión de escenas muy cortas, rodadas con muy pocos medios, y que no consiguen centrar la película en una unidad. El guion es pobre, y los actores parece que pasaban por ahí.
No se crea ninguna tensión, ni hay desarrollo de los personajes, sin que se entienda en ningún momento por qué han llegado a la situación que se plantea.
Es un western, y se puede ver, pero para homenajear a Bud Boetticher hay que hacer mucho más que rodar con tres duros (o dolares) y sin grandes pretensiones formales.
Un 4 por lo que fue Walter Hill.

Me ha entretenido mucho. Es una peli de aventuras, así que nadie puede esperar gore ni nada parecido. Los zombis están bien planteados, pero se mueven más como amenaza que en lo explícito.
Los personajes están correctamente definidos, quizás alguno más que otro, pero en general bastante bien. Se agradece que no se enfrasque en lecturas ideológicas más allá de lo necesario, y que se centre en las personas.
Por lo demás el ritmo es excelente, y no decáe en ningún momento, ni siquiera en la escena del refugio, lo que se agradece.
En fin, que, sin grandes pretensiones, es una película muy, muy entretenida.