La película es un atraco en toda regla. Mira que es difícil hacer una peli tan floja, con un argumento tan pobre y que no sueltes ni una sonrisa en todo el metraje. Las actuaciones no son malas, son otra cosa, algo también difícil de lograr. Con esos personajes tan planos, tan pobres. Sólo ya ver a Carlos Larrañaga con ese acento alemán tan lamentable es indignante. Al único que podemos salvar es a Iñaki Miramón, el único que se puede salvar de la criba. El hombre le pone ganas y eso se nota. Todos los demás un dislate. Muy lamentable también Josema Yuste, que no me explico cómo acepta un papel que no va con él. A veces la falta de dinero es lo que tiene. Hay gente que salva a las chicas, pero hay que tener valor también. Elsa Pataky no vale nada como actriz, sólo para enseñar palmito y da gracias. ¡¡¡Si es que hasta la grandísima Chus Lampreave está lamentable!!! En fin, mejor no pierdan el tiempo, porque no te hace pasar ni un buen rato frente a la pantalla. Un disparate con mayúsculas, un crimen al cine español. Éste cine chusco no lo queremos. Así no.

Lo primero que habría que preguntarse cuando uno se pone a ver ésta película es lo que me va a contar. Y lo que todo el mundo sabe es que tiene que contar la desastroza operación Irene que llevó al derribo por parte de milicias somalíes de dos aviones Black Hawk. Ésto es la película, sin más. No falta historia ni drama, porque ésa es la historia, punto. Sólo se centra en lo que ocurrió en Mogadiscio ese día. Por lo tanto, no entiendo la crítica que dice que hace falta algo más. Lo sorprendente es que una peli donde están pegando tiros la mayor parte de la película consiga mantenerte pegado a la pantalla sin pestañear. Éso es lo meritorio y lo que consigue, con sobresaliente, Ridley Scott. No hace falta dudar que estamos ante una muy buena película, que cuenta lo que tiene que contar. Sin más peros.

La última casa a la Izquierda me parece una muy buena película. Entiendo que haya gente que piense que es demasiado bruta, demasiado cruel, pero a veces no queda más remedio. La historia en sí es una historia muy dura, difícil para el espectador. Yo mismo muchas veces pensaba que no iba a aguantar la peli entera, pero es que el argumento así lo exige. Estamos ante unos locos, ante unos sádicos. Les da igual violar o matar de la forma más cruel posible. Pero ésa es la historia. Si éso es lo que criticamos no tendríamos película. Lo único que suprimiría sería al hijo del sádico. Qué cosa tan patética de personaje. Una vez más, Wes Craven, se erige como experto del cine de terror y de suspense. ¿De verdad queremos un film de terror que no aterrorice, queremos un cine de terror que no nos provoque rechazo, queremos un cine de terror que nos pegue sustos de la manera más rastrera y tópica posible? Yo no lo quiero, por eso creo que "La Última Casa la Izquierda" es una gran película, una gran película de terror.

Lo peor que le puede pasar a una peli que dice ser de terror es que no dé miedo en ningún momento. Y mucho peor aún, es en pleno siglo 21, que el argumento principal sea que viene el coco. Ésto ya no asusta, da risa. El argumento no hay por dónde cogerlo, el final es lo más patético que he visto desde hace mucho tiempo, donde no se desvela absolutamente nada.

¡Qué decepción! ¡!Qué poca gracia tiene! ¡Qué personajes tan nefastos! ¿Se puede estar 45 minutos por capítulo para contarte que van del campamento a un almacén de comida, se encuentran con alien, le dispara y se acaba el capítulo? Es lamentable. Hacía mucho tiempo que no veía una serie tan lenta, tan soporífera, tan todo lo negativo que ahora mismo se te pase por la cabeza. Y para añadir males, de original no tiene nada, ha ido cogiendo cosas de otras series o películas y aquí nos han servido este cóctel horroroso. No la recomiendo en absoluto. Si Noah Wyle quería quitarse el sanbenito del Doctor Carter, desde luego no lo logra en absoluto. Noah, seguiremos recordándote por Urgencias no por ésto.