You must be a loged user to know your affinity with murri
Críticas ordenadas por utilidad
Movie added to list
Movie removed from list
An error occurred

7,3
8.123
7
24 de noviembre de 2013
24 de noviembre de 2013
4 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
Es curioso como funciona nuestra mente, encontrando belleza en una película cuyo adjetivo estético más próximo es la fealdad. Todo, a excepción quizás de la protagonista, es feo. Los secundarios son feos, el entorno, el ambiente claustrofóbico, la sensación de insalubridad y suciedad permanente del metro, los baños públicos, etc. Y sin embargo, una fotografía que no pretende enmascarar lo que retrata, una melena roja desaliñada, una música ochentera y la magia del cine hacen que 'Yo, Cristina F.', a pesar de ser una película que es retrato continuo de la miseria, sea una película artísticamente bella. Fría, oscura, sucia, claustrofóbica y repugnante, pero bella en su conjunto.
Y es que una gran virtud que puede pasar desapercibida es que se trata de una película marcadamente europea. Esa ausencia de artificialidad cinematográfica (diálogos artificiosos o trucos de realización) es básica para rodar una película con un tema tan duro como es la adicción a la heroína, y más aún si los adictos son críos que tienen que prostituirse para pagar sus dosis. Cualquier posicionamiento moral, ya fuera a través del guión o de la realización, hubiera sido un error. Lo más inteligente que puede hacer el director que decide rodar una película como esa es pasar desapercibido. Contar una historia verdadera, sin intentar lucirse en ninguna faceta. En ese sentido un 10 para Uli Edel, que narra la crudeza desde la distancia, dejando que sea el espectador el que saque sus propias conclusiones, sin moralismos ni triquiñuelas baratas.
Y es que una gran virtud que puede pasar desapercibida es que se trata de una película marcadamente europea. Esa ausencia de artificialidad cinematográfica (diálogos artificiosos o trucos de realización) es básica para rodar una película con un tema tan duro como es la adicción a la heroína, y más aún si los adictos son críos que tienen que prostituirse para pagar sus dosis. Cualquier posicionamiento moral, ya fuera a través del guión o de la realización, hubiera sido un error. Lo más inteligente que puede hacer el director que decide rodar una película como esa es pasar desapercibido. Contar una historia verdadera, sin intentar lucirse en ninguna faceta. En ese sentido un 10 para Uli Edel, que narra la crudeza desde la distancia, dejando que sea el espectador el que saque sus propias conclusiones, sin moralismos ni triquiñuelas baratas.

8,1
122.743
9
9 de enero de 2012
9 de enero de 2012
10 de 17 usuarios han encontrado esta crítica útil
Acabo de volver a ver Taxi Driver, y si antes me parecía un peliculón, ahora me ha parecido un peliculón gigantesco.
Antes de irme a dormir he tenido la brillante idea de leer alguna cosilla sobre la peli, y por pura curiosidad he ido leyendo las críticas FF peor valoradas sobre la misma. Después de un rato de diversión me he visto obligado a dejar aquí mi CONTRAcrítica.
Para gustos, colores. Vale. Estamos de acuerdo. Tiene que haber en el mundo gente para todo. Pero hermos@s míos, preguntar en serio qué es lo que tiene esa peli para estar tan bien considerada es no tener ni puñetera idea de cine. NI PUÑETERA IDEA. No hay más discusión. Y para los que quedan desorientados y preguntan insistentemente las virtudes de Taxi Driver, ahí van unas cuantas:
-El guión es tan simple y tan complejo a la vez que resulta magistral. Parece escrito por un genio del guión borracho en una noche de opiáceos. El personaje más bien escrito de la historia del cine. Está medio loco, pero ¿a caso hay alguien que no lo esté? ¿Quién no se vuelve loco viviendo en un antro, trabajando de taxista y padeciendo insomnio? Es, como lo describe Betsy, una 'walking contradiction'. Así somos todos y así deberían ser todos los buenos personajes, pero eso es tan difícil de hacer...los que escriben me entenderán. Es imposible pararme a describir a Travis, porque el personaje tiene tal cantidad de matices que parece más un ejercicio de psicoanálisis profundo que un personaje de película.
-La fotografía del filme y el talento visual de Scorsese son dinamita. Retrata lo peor de la ciudad de Nueva York y aún así dan ganas de irse allí y hacerse proxeneta. ¡Qué manera de presentar el taxi, las calles, la gente, el aspecto de neón gastado reflejado en los charcos, el desenfoque de las luces de la ciudad a través del parabrisas del taxi de Travis! ¡Incluso el puticlub de Iris tiene encanto!
-La música...¡Uy la música! Jazz. Ese saxo interminable que se funde con la sordidez del ambiente nocturno y más decadente de la ciudad que nunca duerme. Impecable. Un regalo para los sentidos.
-Los actores, una gozada. De De Niro no hace ni falta hablar. Qué pena da verle ahora en la etapa final de su carrera haciendo basuras...Jodie Foster está para comérsela. Sexy, dulce, inocente...Cybill Shepard también impecable. Magnífico su personaje. Primero animada y picarona dispuesta a vivir una historia diferente con un guapo taxista un tanto enigmático, para acabar descubriendo que en realidad prefiere un gafapasta sobón y anodino. Las aventurillas están bien hasta que se complican y te das cuenta de que además de estar loco no vas a poder hablar con él ni de música, ni de cine, ni de política...
Bueno, y basta, porque podría seguir horas escribiendo. Únicamente hacía la crítica para cagarme en los que la ven un bodrio y me he animado...
Mierda, no puedo dormir...¿Are you talking to me?
Antes de irme a dormir he tenido la brillante idea de leer alguna cosilla sobre la peli, y por pura curiosidad he ido leyendo las críticas FF peor valoradas sobre la misma. Después de un rato de diversión me he visto obligado a dejar aquí mi CONTRAcrítica.
Para gustos, colores. Vale. Estamos de acuerdo. Tiene que haber en el mundo gente para todo. Pero hermos@s míos, preguntar en serio qué es lo que tiene esa peli para estar tan bien considerada es no tener ni puñetera idea de cine. NI PUÑETERA IDEA. No hay más discusión. Y para los que quedan desorientados y preguntan insistentemente las virtudes de Taxi Driver, ahí van unas cuantas:
-El guión es tan simple y tan complejo a la vez que resulta magistral. Parece escrito por un genio del guión borracho en una noche de opiáceos. El personaje más bien escrito de la historia del cine. Está medio loco, pero ¿a caso hay alguien que no lo esté? ¿Quién no se vuelve loco viviendo en un antro, trabajando de taxista y padeciendo insomnio? Es, como lo describe Betsy, una 'walking contradiction'. Así somos todos y así deberían ser todos los buenos personajes, pero eso es tan difícil de hacer...los que escriben me entenderán. Es imposible pararme a describir a Travis, porque el personaje tiene tal cantidad de matices que parece más un ejercicio de psicoanálisis profundo que un personaje de película.
-La fotografía del filme y el talento visual de Scorsese son dinamita. Retrata lo peor de la ciudad de Nueva York y aún así dan ganas de irse allí y hacerse proxeneta. ¡Qué manera de presentar el taxi, las calles, la gente, el aspecto de neón gastado reflejado en los charcos, el desenfoque de las luces de la ciudad a través del parabrisas del taxi de Travis! ¡Incluso el puticlub de Iris tiene encanto!
-La música...¡Uy la música! Jazz. Ese saxo interminable que se funde con la sordidez del ambiente nocturno y más decadente de la ciudad que nunca duerme. Impecable. Un regalo para los sentidos.
-Los actores, una gozada. De De Niro no hace ni falta hablar. Qué pena da verle ahora en la etapa final de su carrera haciendo basuras...Jodie Foster está para comérsela. Sexy, dulce, inocente...Cybill Shepard también impecable. Magnífico su personaje. Primero animada y picarona dispuesta a vivir una historia diferente con un guapo taxista un tanto enigmático, para acabar descubriendo que en realidad prefiere un gafapasta sobón y anodino. Las aventurillas están bien hasta que se complican y te das cuenta de que además de estar loco no vas a poder hablar con él ni de música, ni de cine, ni de política...
Bueno, y basta, porque podría seguir horas escribiendo. Únicamente hacía la crítica para cagarme en los que la ven un bodrio y me he animado...
Mierda, no puedo dormir...¿Are you talking to me?
9
6 de octubre de 2013
6 de octubre de 2013
7 de 11 usuarios han encontrado esta crítica útil
Antes que nada hay que aclarar que esa película no es de ciencia ficción. Que esé ambientada en el espacio no signifique que la historia no puede ser posible. Es más, uno de los grandes aciertos de la trama es precisamente que es totalmente veraz. Es una experiencia que es totalmente ajena al 99% de la población mundial, pero efectivamente hay algunos privilegiados (o no tanto después de ver la peli) que tienen la oportunidad de abandonar literalmente el planeta y vivir una historia como la de los protagonistas. 'Gravity' si es, en cambio, el thriller espacial más impactante de la historia del cine.
Cuarón hace poesía con la cámara, acompañado de una impecable fotografía cósmica y de una banda sonora sideral que forman un todo casi perfecto. Y todo eso, además, está rodado con maestría Hitchockiana, consiguiendo una tensión que no decae en los 90 minutos que dura el film.
Sin embargo, por encima de toda esa perfección técnica inigualable (con un 3D que de una vez aporta algo) está el 'más difícil todavía': conseguir que el espectador entre en la historia y vuelva a sentirse niño, insignificante ante la grandiosidad del espacio, aprendiendo como en los primeros años de vida como funciona un entorno que le es totalmente desconocido.
Entrando en el terreno subjetivo, con Gravity tuve una experiencia personal muy significativa.
En 1999, cuando yo tenía 11 años, se inauguró en Port Aventura una nueva atracción, Sea Odyssey, dónde figura que los visitantes forman parte de una expedición submarina guiada por un delfín en donde se encuentran un temible monstruo marino. La intención es hacer sentir a los visitantes como si realmente estuvieran dentro de un submarino bajo el mar, cuando en realidad están sentados encima de una butacas que se mueven enfrente de una pantalla. Recuerdo el impacto que tuvo en mí esa atracción, y es un impacto similar al que tuve con 'Gravity', con la gran diferencia de tener 14 años más, una carrera universitaria (sin trabajo fijo, por supuesto) y un criterio bastante más formado que cuando era niño. Realmente vibré con cada fotograma y me dejé las uñas en los reposabrazos de la butaca. Sólo por eso ya me parecen los 10 euros mejor invertidos en una sala de cine. Ver a hombres hechos y derechos de 50 años estremecerse en una sala oscura con unas gafas ridículas realmente no tiene precio.
Ya me estoy alargando, pero creo que esas críticas a un guión plano, aunque puedan tener fundamentos, en ese caso son secundarias, pues es tal la perfección técnica del filme que poco importa que en algún diálogo se le vea el plumero Hollywoodiense a la película, ni tampoco que Clooney haga su personaje 'Nespresso' por excelencia: simplemente hay que dejarse llevar por esa experiencia audiovisual irrepetible, que sin duda marcará un antes y un después en la narrativa 3D en particular y en la historia del cine en general.
Es cierto que el guión es relativamente plano, y los gafapastas se sentirán traicionados por no poder aplicar a los personajes de la cinta las teoría freudianas que han aprendido en clase , pero no creo que Cuarón tenga pretensiones de ser Bergman. Sin embargo si que se pueden percibir claras metáforas al inicio de la vida, como una clara alusión a un feto dentro del útero materno o los primeros pasos a dos patas de un bebé. Interpreto que lo que Cuarón pretende, como ya he comentado, es retratar esa impotencia en un entorno nuevo para el hombre, dónde todas las reglas que ha aprendido en sus años de experiencia terrestre no sirven para nada y se siente como un bebé que no alcanza a entender lo que pasa a su alrededor.
Para acabar, solamente queda recomendar la película a todo el mundo que quiera sentirse niño de nuevo, ya que si alguien queda indiferente ante tanta belleza, ante esa experiencia audiovisual sin precedentes, o no tiene corazón, o tiene una idea muy equivocada de lo que es el cine.
Cuarón hace poesía con la cámara, acompañado de una impecable fotografía cósmica y de una banda sonora sideral que forman un todo casi perfecto. Y todo eso, además, está rodado con maestría Hitchockiana, consiguiendo una tensión que no decae en los 90 minutos que dura el film.
Sin embargo, por encima de toda esa perfección técnica inigualable (con un 3D que de una vez aporta algo) está el 'más difícil todavía': conseguir que el espectador entre en la historia y vuelva a sentirse niño, insignificante ante la grandiosidad del espacio, aprendiendo como en los primeros años de vida como funciona un entorno que le es totalmente desconocido.
Entrando en el terreno subjetivo, con Gravity tuve una experiencia personal muy significativa.
En 1999, cuando yo tenía 11 años, se inauguró en Port Aventura una nueva atracción, Sea Odyssey, dónde figura que los visitantes forman parte de una expedición submarina guiada por un delfín en donde se encuentran un temible monstruo marino. La intención es hacer sentir a los visitantes como si realmente estuvieran dentro de un submarino bajo el mar, cuando en realidad están sentados encima de una butacas que se mueven enfrente de una pantalla. Recuerdo el impacto que tuvo en mí esa atracción, y es un impacto similar al que tuve con 'Gravity', con la gran diferencia de tener 14 años más, una carrera universitaria (sin trabajo fijo, por supuesto) y un criterio bastante más formado que cuando era niño. Realmente vibré con cada fotograma y me dejé las uñas en los reposabrazos de la butaca. Sólo por eso ya me parecen los 10 euros mejor invertidos en una sala de cine. Ver a hombres hechos y derechos de 50 años estremecerse en una sala oscura con unas gafas ridículas realmente no tiene precio.
Ya me estoy alargando, pero creo que esas críticas a un guión plano, aunque puedan tener fundamentos, en ese caso son secundarias, pues es tal la perfección técnica del filme que poco importa que en algún diálogo se le vea el plumero Hollywoodiense a la película, ni tampoco que Clooney haga su personaje 'Nespresso' por excelencia: simplemente hay que dejarse llevar por esa experiencia audiovisual irrepetible, que sin duda marcará un antes y un después en la narrativa 3D en particular y en la historia del cine en general.
Es cierto que el guión es relativamente plano, y los gafapastas se sentirán traicionados por no poder aplicar a los personajes de la cinta las teoría freudianas que han aprendido en clase , pero no creo que Cuarón tenga pretensiones de ser Bergman. Sin embargo si que se pueden percibir claras metáforas al inicio de la vida, como una clara alusión a un feto dentro del útero materno o los primeros pasos a dos patas de un bebé. Interpreto que lo que Cuarón pretende, como ya he comentado, es retratar esa impotencia en un entorno nuevo para el hombre, dónde todas las reglas que ha aprendido en sus años de experiencia terrestre no sirven para nada y se siente como un bebé que no alcanza a entender lo que pasa a su alrededor.
Para acabar, solamente queda recomendar la película a todo el mundo que quiera sentirse niño de nuevo, ya que si alguien queda indiferente ante tanta belleza, ante esa experiencia audiovisual sin precedentes, o no tiene corazón, o tiene una idea muy equivocada de lo que es el cine.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
spoiler:
Quizás en único 'pero' que se le pueda achacar son esas discutibles líneas de monólogo en solitario de una más que correcta Sandra Bullock. Es cierto que ya hemos empatizado lo suficiente con la protagonista y ya estamos sufriendo con ella, no hace falta esa 'George, saluda a mi hija en el cielo, dile que la quiero y que tengo el zapato rojo'.
Sin embargo repito que ese pequeño 'pero' está muy lejos de empañar lo vivido en la butaca viendo esa grandísima obra del cine contemporáneo.
Sin embargo repito que ese pequeño 'pero' está muy lejos de empañar lo vivido en la butaca viendo esa grandísima obra del cine contemporáneo.

6,4
72.116
5
30 de junio de 2012
30 de junio de 2012
3 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Te creces, y mucho. La peli empieza bien. Incluso muy bien, diría. Unos niños con gancho, una muy buena recreación de los inicios de un director de cine, y todo muy retro y muy molón. A partir del primer giro (el choque del tren) empiezan los despropósitos (nombro algunos en spoiler)
Vale que en este tipo de cine que quiere ser un homenaje a Spielberg, la verosimilitud es algo relativo. Hay que entrar en la historia y dejarse llevar por lo que vemos en pantalla. Todo el mundo sabe que es imposible balancearse por un camión a todo gas y cargarse a puñetazos a los 5 nazis que lo ocupan, pero a todos nos hace sufrir Indiana Jones y a todos nos queda un buen sabor de boca cuando acaba la peli. Es la magia del cine. Pero hay que saber gestionarla, y Abrams abusa.
Hacer una peli con regusto a Spielberg no te da carta blanca para hacer lo que te da la gana y pretender que cuele.
Otro gazapo importante es el abuso de tópicos: familia rota, chica guapa y rebelde, incursión en el colegio, militares con las manos sucias, el colgante de la mamá, el bicho incomprendido, los perros que se van...
Y lo peor de todo: el final. El clímax es largo y a cada segundo se vuelve más absurdo, predecible, pasteloso, abrupto y contradictorio (detalles en spoiler)
Le pongo un cinco porque a pesar de todo tiene cosas buenas. Una producción notable (cosa que no es difícil con un presupuesto tan alto), unas interpretaciones decentes, una buena fotografía, algunos diálogos buenos, y ciertos homenajes que consiguen despertar el niño que llevamos dentro.
Pero volvemos a lo de siempre. Todo eso está muy bien. Pero lo principal es la historia. No se puede empezar la casa por el tejado.
Vale que en este tipo de cine que quiere ser un homenaje a Spielberg, la verosimilitud es algo relativo. Hay que entrar en la historia y dejarse llevar por lo que vemos en pantalla. Todo el mundo sabe que es imposible balancearse por un camión a todo gas y cargarse a puñetazos a los 5 nazis que lo ocupan, pero a todos nos hace sufrir Indiana Jones y a todos nos queda un buen sabor de boca cuando acaba la peli. Es la magia del cine. Pero hay que saber gestionarla, y Abrams abusa.
Hacer una peli con regusto a Spielberg no te da carta blanca para hacer lo que te da la gana y pretender que cuele.
Otro gazapo importante es el abuso de tópicos: familia rota, chica guapa y rebelde, incursión en el colegio, militares con las manos sucias, el colgante de la mamá, el bicho incomprendido, los perros que se van...
Y lo peor de todo: el final. El clímax es largo y a cada segundo se vuelve más absurdo, predecible, pasteloso, abrupto y contradictorio (detalles en spoiler)
Le pongo un cinco porque a pesar de todo tiene cosas buenas. Una producción notable (cosa que no es difícil con un presupuesto tan alto), unas interpretaciones decentes, una buena fotografía, algunos diálogos buenos, y ciertos homenajes que consiguen despertar el niño que llevamos dentro.
Pero volvemos a lo de siempre. Todo eso está muy bien. Pero lo principal es la historia. No se puede empezar la casa por el tejado.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
spoiler:
desastres:
1)si te ves con valor de querer pintar un accidente de tren como si en vez de vagones llevara cabezas nucleares bañadas en queroseno (que vale, estás en Hollywood y te lo perdono), no tengas los SANTOS COJONES de pretender que nos traguemos que el tipo que se come el tren de lleno salga vivo.
2) El bicho está cabreado. OK. Pero con todo el mundo. No vale que venga el niño prota y decida dejarlo en el suelo. Sólo le falta darle dos besos.
3)Lo del colgante es patético. Si quieres poner un objeto con poder dramático, tienes que ser consecuente. ¿Qué coño pinta que unos militares que están destruyendo el pueblo entero se lo quiten? No cuela
4) el bicho secuestra a la gente para colgarla en su guarida y comérsela cuando le pica el gusanillo. Pero la gente no es como un juguete con pilas. No vale que vengan los niños y con dos palmaditas se despierten como si nada.
5) que alguien me explique por qué narices la niña dice, justo después de ser descolgada, que el bicho es bueno y sólo quiere irse a casa.
6)La cinta del profesor de colegio es demasiado evidente (y muy cutre). Se le ve el plumero a leguas.
7)el bicho se larga alegremente con una nave hecha a base de microondas, bicicletas y piezas de coche, y lo decide después de hablar con el niño
1)si te ves con valor de querer pintar un accidente de tren como si en vez de vagones llevara cabezas nucleares bañadas en queroseno (que vale, estás en Hollywood y te lo perdono), no tengas los SANTOS COJONES de pretender que nos traguemos que el tipo que se come el tren de lleno salga vivo.
2) El bicho está cabreado. OK. Pero con todo el mundo. No vale que venga el niño prota y decida dejarlo en el suelo. Sólo le falta darle dos besos.
3)Lo del colgante es patético. Si quieres poner un objeto con poder dramático, tienes que ser consecuente. ¿Qué coño pinta que unos militares que están destruyendo el pueblo entero se lo quiten? No cuela
4) el bicho secuestra a la gente para colgarla en su guarida y comérsela cuando le pica el gusanillo. Pero la gente no es como un juguete con pilas. No vale que vengan los niños y con dos palmaditas se despierten como si nada.
5) que alguien me explique por qué narices la niña dice, justo después de ser descolgada, que el bicho es bueno y sólo quiere irse a casa.
6)La cinta del profesor de colegio es demasiado evidente (y muy cutre). Se le ve el plumero a leguas.
7)el bicho se larga alegremente con una nave hecha a base de microondas, bicicletas y piezas de coche, y lo decide después de hablar con el niño

6,6
24.669
8
14 de septiembre de 2010
14 de septiembre de 2010
3 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Norah Jones interpreta mejor las canciones que los guiones. Si. Y hablando de guiones, al de esta película le sobra un poco de azúcar (sobretodo en algún momento entre Law y Jones) y le falta un poco de matiz y profundidad (una chica que emprende un viaje para encontrarse a si misma...vale, si, pero...no) y se le ve un poco el plumero (lo de las llaves...¡ay, que justo! ¡ay que en algunos momentos se nos cayó el pote de miel encima de los diálogos y nos quedaron algunas metaforillas un poco teenager en pleno 'Crepúsculo' de pubertad!
A pesar de ese poco prometedor párrafo, un pedazo de ocho. ¿Por qué? Fácil. Wong kar-Wai. La dirección es magistral. Los planos son atrevidos y extremadamente sugerentes. Muy coloridos. Muy estéticamente adecuados y dramáticamente inútiles. Pero, ¿dónde está escrito que siempre tenga que importar mas el contenido que el continente? Cada fotograma de este film está cargado de belleza. La puesta en escena, la caracterización de personajes y la fotografía...juro que si alguna vez estoy en un bar con un whisky en la mano y entra Rachel Weisz, ESA Rachel Weisz, con ESE vestido de topos, mientras suena ESA música, y me mira, me quedo mas loco que el bueno de David Strathairn.
¡Por que ésta es otra! La banda sonora es de puro aplauso. Impecable. Espectacularmente bien escogida. Lo visual y lo sonoro, en determinados momentos, hacen de esta película casi poesía. Emocionan esas escenas, estos momentos de transición de imagen y música que dan un tiempo muerto a la narración.
A mi me pareció una gran película. He visto mejores, si. Sobre todo por el guión. Pero a pesar de eso le doy mi ocho. Por el mérito que creo que tiene ese toque Kar-wai. Por que creo que es bueno que quede gente que no olvide nunca que el cine puede ser visual sin llegar a ser absurdo espectáculo vacío. Por que me chifló la banda sonora, especialmente esa bonita versión del temazo de Neil Young.
Diferente y muy recomendable.
A pesar de ese poco prometedor párrafo, un pedazo de ocho. ¿Por qué? Fácil. Wong kar-Wai. La dirección es magistral. Los planos son atrevidos y extremadamente sugerentes. Muy coloridos. Muy estéticamente adecuados y dramáticamente inútiles. Pero, ¿dónde está escrito que siempre tenga que importar mas el contenido que el continente? Cada fotograma de este film está cargado de belleza. La puesta en escena, la caracterización de personajes y la fotografía...juro que si alguna vez estoy en un bar con un whisky en la mano y entra Rachel Weisz, ESA Rachel Weisz, con ESE vestido de topos, mientras suena ESA música, y me mira, me quedo mas loco que el bueno de David Strathairn.
¡Por que ésta es otra! La banda sonora es de puro aplauso. Impecable. Espectacularmente bien escogida. Lo visual y lo sonoro, en determinados momentos, hacen de esta película casi poesía. Emocionan esas escenas, estos momentos de transición de imagen y música que dan un tiempo muerto a la narración.
A mi me pareció una gran película. He visto mejores, si. Sobre todo por el guión. Pero a pesar de eso le doy mi ocho. Por el mérito que creo que tiene ese toque Kar-wai. Por que creo que es bueno que quede gente que no olvide nunca que el cine puede ser visual sin llegar a ser absurdo espectáculo vacío. Por que me chifló la banda sonora, especialmente esa bonita versión del temazo de Neil Young.
Diferente y muy recomendable.
Más sobre murri
Cancelar
Limpiar
Aplicar
Filters & Sorts
You can change filter options and sorts from here