Si esta película es una película de terror y de entidades sobrenaturales, empezaré a tener miedo de los chistes de Jaimito y de los monólogos humorísticos de determinados canales televisivos.
Sobradamente agotado el género del falso documental de terror estilo bruja de Blair y otras tantas que la siguieron intentando hacerse las originales y de transmitir el miedo en primera persona, Paranormal Activity debería haberse titulado "Pathetic Activity".
Un argumento flojo, obvio, sumamente previsible y desgastado es lo que nos encontramos en este film. Una historia a la que le cuesta arrancar desde un principio y que cuando parece lograrlo, no se queda ni a la mitad de un desarrollo decente.
Otro punto negativo para la película es el referente a las actuaciones, paupérrimas cuanto más, con unos actores principales (la pareja en torno a la cual gira la historia) que no acaban de mostrar su personalidad, si es que la tienen, con permanentes cambios de actitud y de orientación que más bien podrían tratarse como una patología médica de bipolaridad, puesto que a lo largo del transcurso del film hay momentos en los que no sabremos si estamos ante el personaje que se nos había presentado inicialmente o ante una persona completamente diferente.

EN CONCLUSIÓN, una película donde la interpretación no llega ni a la calificación de nefasta, donde el argumento sigue sin aparecer de forma definida y estructurada, y donde, una vez más, dentro de un género tan sobreexplotado como el terror, se prescinde de los clásicos sustos guiados por la música inquietante que acompaña de fondo y se intenta "innovar" con ideas saturadas, obteniéndose como resultado una película vacía y que no es más que una solemne pérdida de tiempo.