Anarquismo bueno, USA malo. El anarquismo aparece blanqueado, son gente noble, el anarquista no tira a matar, solo pincha ruedas. Los americanos como siempre aparecen ennegrecidos, son codiciosos mafiosos sin escrúpulos ni alma,

Aparte del maniqueísmo simplista de turno, la peli es disfrutable.

Es cierto que algunas actuaciones dejan que desear, pero en general el elenco está bien escogido. Mención especial a Ballesta y su eterna sonrisa pícara y al jefe de policía francés. En el lado contrario un Che Guevara poco convincente y demasiado alto.

La ambientación está muy lograda en las diferentes épocas históricas. Aún así, no se han resistido a meter un par de negras entre la ambientación del Paris de los años 60. Por aquello de la inclusión, más forzada y necesitamos calzador. Pero no, no es una película ideológica con contenidos propagandísticos y la retahíla woke tan habitual hoy en día. Un pequeño respiro.

El gran acierto de la película es llevarte a la nostalgia del tiempo en que murieron los ideales y se impuso el pragmatismo, a la última generación que anteponía valores a su bienestar.

Aquello sí que era lucha, y no ponerse detrás de un cartel morado y dejarse largo el sobaco.

Película estropeada por la necesidad de incluir los parámetros de la ideología obligatoria: lesbianas, minorías etnicas, empoderamiento femenino, hombre blanco heterosexual es el malo malísimo.

La historia de amor lésbico está metida con calzador, no aporta nada a la historia, no tiene sentido y estropea el ritmo de la película con diálogos forzados para soltar eslóganes políticos pro LGTB.

Los negros son buenos y amables, enfrente los blancos son niños pijos ricos desagradables y los primeros en morir.

Y ya si la protagonista está empoderada y dirige todo el cotarro, es lesbiana y con rasgos éticos, tenemos a la líder perfecta

Es la ideología oficial a la que te has de convertir, te guste o no.

La serie es una excusa más de Netflix para meterte la ideología progre obligatoria.

Un relación lésbica interracial adolescente prohibida es un orgasmo para los diseñadores de la ideología progre y el lobby LGTB. Que más le pueden pedir a una historia. Ah si, que los cazadores buenos sean los negros y los cazados malos sean los blancos. Con eso, un poco más de diversidad racial y un mucho de empoderamiento feminista, receta woke perfecta.

Argumentos, narrativa, actores, diálogos y puesta en escena son lo de menos.

Netflix cayendo en picado en suscriptores y cada vez más proyectos basados exclusivamente en ideología woke cancelados.

Habéis terminado con la paciencia del espectador a base pseudo-progresismo barato.

Un planteamiento inicial atractivo se disuelve como un azucarillo. La idea se podría haber explotando mucho mejor. La cinta se hace larga con escenas repetitivas, sin cambios de escenario, pero ya el final estropea la película del todo.

Es de agradecer que rebajen la intensidad del contenido ideológico progre woke, que igualmente aparece también en esta película, obvio, como todos los productos de Netflix, pero al menos no está convertido en el eje central.

Thor está muy bien en su papel, lo único que se salva. Pero si reservan un papel protagonista para un hombre blanco heterosexual, ya sabemos de antemano que va a ser el malo despiadado psicopatía sin escrúpulos.

Que si, que la ambientación, vestuario, caracterización, etc, etc, están muy conseguidos, mucho gusto por el detalle, la puesta en escena, la fotografía, los silencios, las miradas, los gestos, etc, etc, pero la serie aburre, aburre mucho.

Innecesariamente larga, especialmente algunos capítulos en los que no pasa gran cosa. La Inglaterra de esta época daba para mucho más.

Pon un mono en el escenario, vístelo de seda y deja que los tontos aplaudan.