Pues si, exactamente lo mismo que el famoso y añorado juego. Torrente 4 se convierte en un desfile de famosos y frikis (y hasta las dos cosas) que ofrecen su imagen para fardar de haber participado en una peli, salir en las revistas y por último y lo más preocupante en algunos casos, poder considerarse ya actores. A parte de todo esto (que ya es bastante), decir que Santiago Segura borda su personaje y que el film es mejor que su parte segunda y tercera, mejor que la primera no porque en aquella había mas actores, y claro, eso puedo salvar una película por muy malo que sea el guión.

Clint Eastwood destaca en esta "Gran Torino" mas como actor que como director, y eso que la dirección es ejemplar, al estilo clásico, sencilla, funcional y sin estridencias. Pero es en la interpretación donde da el Do de pecho, cada plano, cada mirada y cada gesto es de Oscar, llena cada momento con su presencia y hace que te olvides de lo demás. Mención aparte merece el guión y la historia, una de esas historias que cuentan las cosas como son, donde cada insulto y cada mal gesto está justificado, porque el personaje es así, sin exageraciones ni sobreactuaciones y donde te crees lo que ves porque en el fondo sabes que es real, que hay personas así y la peli no se corta en contártelo.

Pues como refleja el título, a veces comedia, a veces drama y en su conjunto ni lo uno ni lo otro. El director no sabe que está rodando, filma una escena en que la te partes el c... y la siguiente te deja con un bajón de mucho cuidao. Como diría Dinio, "estoy confundido". Ha querido realizar una peli a la americana donde un hombre de éxito de repente se encuentra con unas inesperadas visitas y su vida empieza a dar un giro de 360º, todo ello envuelto de algunos pequeños equívocos y enredos que alargan un poco la vida de la misma. Esto no estaría mal si no le metiese de vez en cuando unas altas dosis de drama, encima del malo, y ñoñería, bastante ñoñería. En fin, una lástima de película.

Julian Schnabel, o mejor dicho, Jean Dominique Bauby, nos cuenta un cuento, un relato de superación y esperanza. Una historia que relata como se consigue sobrevivir con uno mismo encerrado en un cuerpo, en una "escafandra" desde la cual sólo se puede observar, pero nada más. No pudiendo interactuar con su familia, amigos, con las cosas y lugares que ve y que le rodean, sólo sus sueños y su imaginación logran hacerle escapar por momentos de su encarcelamiento, son las únicas cosas que le animan a continuar. Julian Schnabel nos muestra un mundo de luz y de sensaciones que no sabemos apreciar desde nuestro cómodo sofá. Bello y poético guión que se merece todos los premios habidos y por haber.

George Cloney intenta captar la esencia de aquellas pelis clásicas de Katherine Hepburn y Cary Grant, a veces parece que lo consigue, pero en general se queda en eso, un mero intento.