Haz click aquí para copiar la URL
España España · MADRID
Críticas de ELZIETE
Críticas 3.351
Críticas ordenadas por utilidad
8
4 de octubre de 2020
8 de 8 usuarios han encontrado esta crítica útil
Podríamos decir sin temor a equivocarnos que el gran protagonista o protagonistas de esta estupenda serie policiaca junto con la ciudad de Oxford son sus 14 directores artísticos. Ellos se han encargado de que cada película-episodio (duran 90 m.) sea una delicia visual, aunque se relaje en las últimas temporadas, en la que merece detener la imágen y saborear cada detalle de ese viaje en el tiempo al Oxford de mediados de los sesenta con un repaso social paralelo a cada caso. 

Y sobre esa base se construye cada caso del joven inspector del Valle del Támesis, Endeavour (esforzado) Morse. Un Morse que vio la luz en 1975 en "Último bus a Woodstock" bajo la pluma del escritor británico Colin Dexter (1934-2017) prolongando sus andanzas hasta 1999. Un Dexter que ha visto como su personaje triunfaba en la pequeña pantalla con "Inspector Morse" (1987-2000) interpretado por John Thaw, una secuela "Lewis" (2006-15) basada en "Robbie" colaborador principal de Morse y esta que nos ocupa que lleva desde el 2012 sumando siete temporadas. El propio Dexter ha colaborado en la supervisión de los guiones.

El peculiar carácter de este detective de la ciudad universitaria, amante de los crucigramas y la Ópera, realmente esforzado y minucioso con cada caso que acaban por absorber su vida privada interpretado notablemente por Shaun Evans nos engancha desde el principio sobresalientemente arropado por la maestría de Roger Allam como el detective inspector Fred Thursday y un resto del elenco que consigue destacar y realzar a sus personajes bien dibujados (Me encanta James Bradshaw como el médico forense DeBryn).

Hay que reconocer que los casos son laboriosos y enrevesados haciendo más disfrutable su presentación y desarrollo que su desenlace final ciertamente explicativo y como se ha escrito dejando un poco al margen al espectador. La dos últimas temporadas han dejado traslucir un cierto agotamiento, a pesar de algún capítulo memorable pero la empatía que desprenden sus personajes principales, incluyendo esa joyita de Jaguar Mk 1 y su gran calidad de producción hacen de "Endeavour" una gran serie en su género y su confirmada temporada 8 ya está tardando.

cineziete.wordpress.com
ELZIETE
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
8
20 de abril de 2017
8 de 8 usuarios han encontrado esta crítica útil
!Ah...!, aquellas comedias de los años 30, tan despreocupadas, disparatadas, irreales y sobre todo tan divertidas. Reflejo de unos tiempos tan buenos y tan malos como estos para los de siempre pero donde en la igualitaria oscuridad de la sala de un cine aún podíamos creer que el mundo era como en las películas. A sus 45 años en el momento del estreno de esta comedia el maestro Walsh llevaba al menos una cincuentena de películas en sus alforjas desde los inicios del séptimo arte.

La excelente Joan Bennet en pleno florecimiento a sus 22 años empieza a destacar en esta descarada y pizpireta camarera que le da la replica a un maduro Tracy descubierto por John Ford en el teatro y que a dos años de su debut en el cine ya había realizado 16 películas. Se rodaba en poco tiempo, todo iba muy deprisa, casi tanto como el ritmo inigualable que impone a sus cintas Raoul Walsh. Nadie como él para contar tantas cosas en tan poco tiempo, en este caso menos de una hora y media. La acción es constante, mezclando en un batiburrillo alocado y delicioso la trama romántica con la screwboll clásica y el thriller, unos diálogos de metralleta y una utilización de los espacios que ya quisieran muchos directores actuales.

Durante algo más de una hora he vuelto a recuperar la fe en la comedia sin pretensiones y sin prejuicios (esta está rodada antes del código Hays y se nota, entre otras cosas por la mofa y escarnio descarado de la aún vigente en ese momento "ley seca"), bien interpretada y mejor dirigida. Un placer.
ELZIETE
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
10
28 de noviembre de 2016
8 de 8 usuarios han encontrado esta crítica útil
1925, aún faltaban cuatro años para la gran depresión. En el interior del México profundo pululan algunos norteamericanos cuyo pasado presumimos turbio o aventureros en busca de fortuna convertido en poco menos que mendigos, parias sociales. Otros como el interpretado por el propio Huston a instancias del misterioso escritor de la novela original, B. Traven, intentan hacer negocios aprovechando el nuevo periodo de paz con el presidente Elias Calles (Villa había muerto dos años antes), en un México convulso que al años siguiente ya estaría embarcado en la Guerra Cristera, otro conflicto interno.
Todo ello constituía el marco de la novela de "aventuras" y retratos psicológicos que se constituyó en imán inevitable para la personalidad de Huston, que sentía debilidad por los perdedores y los lugares exóticos.
El proyecto venia de antes de la guerra con un reparto diferente pero fue aparcado por esta y un Huston ya consolidado como director le vendió la moto a Jack Warner que presumía de no leerse los guiones y con la promesa de rodar en exteriores rapidito y matizando una de serie B, le sopló 3.800.000 dólares de la época y cinco meses y medio de rodaje. Warner llegó a declarar que efectivamente los protagonistas estaban buscando oro: el suyo.
A pesar del éxito de la crítica su recaudación inicial fue exigua aunque llegó a dar mucho más de los gastado con el tiempo y sus reposiciones. El reparto final exigía que la estrella del momento que era Bogart encabezara el cartel, pero los tres (Holt y el padre del director, el consagrado Walter Huston) estuvieron magníficos. A la postre el zorro de Walter se llevó el mejor trozo del pastel con una interpretación soberbia que le valió el Oscar. Bogart arriesgó en un personaje a contracorriente del que sacó una composición memorable aunque a veces excesivamente subrayada por el guión. Y Holt se quedó a la sombra de los dos monstruos pero sin desmerecer un ápice con su trabajo.
Con una primera parte en la que el ambiente y la presentación de los personajes es modélica comienza la aventura (el rodaje fue tan duro o más como la ficción) con tintes de western crepuscular que tanto influiría posteriormente en Peckimpack, en busca del oro. Una vez alcanzada la meta, cada uno de ellos deberá contestarse a la pregunta de si es un fin en si mismo, un medio para alcanzar una felicidad personal e intransferible o una puerta abierta a la codicia y al precipicio sin retorno.
El desierto, la arena, los bandidos, la montaña, la noche y sus fantasmas danzando al resplandor de la hoguera, los indios nativos, peleas de bar, empresarios corruptos, justicia somera y la burla final del destino con el que los dioses se divierten con los humanos para que comprendan donde radica la verdader felicidad hacen en la mirada de Huston una obra maestra.
Excelentes secundarios (el niño Robert Blake se haría famoso al protagonizar en los 70 la serie de televisión " Bareta" y más tarde por ser acusado y absuelto del homicidio de su mujer), todo encaja en esta película imprescindible y mítica.
Al final se llevó el Oscar a mejor película y Huston hijo al mejor director haciendo doblete por primera y única vez en la historia con su padre. Las penalidades, como en la película acabaron en risas. Bien está.
ELZIETE
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
9
7 de julio de 2016
8 de 8 usuarios han encontrado esta crítica útil
En 1946, un año después de que su cuarto film "Roma ciudad abierta", triunfara internacionalmente dando comienzo al rupturista neorrealismo italiano, Rossellini "estrenó" dos películas: "Desiderio" y "Paisá". Aunque la primera la empezó a rodar en el 43, fue interrumpida por la guerra y la terminó Marcello Pagliero al final de la misma cambiando el guión. Su temática sobre una mujer promiscua sexualmente hizo que la censura la hiciera desaparecer. El propio Pagliero había contribuido con Rossellini en "Roma..." y colaboró en el guion de la que nos ocupa.
"Paisá", voz italiana con la que se denominaba a los soldados americanos que liberaron Italia de la ocupación nazi, es un mosaico de seis episodios con seis guionistas diferentes entre ellos Fellini que tomando como hilo conductor el periplo de las tropas americanas en Italia refleja la realidad del país desde distintos puntos de vista, partiendo de lo individual y casi anecdótico para llegar a una generalidad que va más allá del conflicto y de las relaciones entre liberadores y liberados para acabar siendo una reflexión sobre la fragilidad humana y el sinsentido de cualquier guerra.
Rossellini sigue ahondando en el neorrealismo: espacios reales y ausencia de actores profesionales. El resultado a pesar de ser alabado por la crítica no gusta a todo el mundo y se critica el bilingüismo de la cinta y la falta de emotividad ante unos actores excesivamente simples y esquemáticos que no potencian el drama y los dialogos de sus personajes como lo harían los profesionales.
Personalmente pienso que la cinta es una maravilla y que cada uno de los episodios esta rodado con maestría, un ritmo y unos movimientos de cámara precisos que imprimen belleza y desolación a cada uno de ellos en su justa medida. Los personajes son en su desgarradora simplicidad inolvidables y Rossellini acertadamente no enfatiza ni subraya la tragedia que conlleva cada uno de ellos. No creo que se pueda comparar con "Roma...", es otra mirada que bebiendo de las mismas fuentes ahonda en las raíces del desastre.
Las escenas documentales enmarcan el contexto de cada uno de los episodios, impregnados de una fatalidad solo rota por la esperanza del episodio en que los frailes son capaces de sugerir esperanza en aras de algo o alguien superior a las mezquindades humanas.
Rossellini contó con el apoyo de la MGM para la financiación que quizás esperaba otro tipo de film y no una obra tan genial con un tratamiento tan especial como esta.
ELZIETE
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
8
16 de febrero de 2015
8 de 8 usuarios han encontrado esta crítica útil
A estas alturas de sus 75 años el director alemán, oscarizado por "El tambor de hojalata" allá por el 79 tiene arte y oficio suficiente para hacerse con la adaptación de esta obra teatral y dotarla de la solvencia y el ritmo necesario para que continúe el éxito cosechado sobre los escenarios por los mismos actores. A Dussollier y Arestrup se les ve cómodos en sus roles y aportan personalidad y carisma a este enfrentamiento entre adversarios en plena guerra mundial. Supuestamente basada en hechos reales el Gobernador militar de París, general alemán, revoca la monstruosa orden de Hitler de arrasar París y sus habitantes antes de verse obligado a abandonarla por el empuje de las fuerzas aliadas gracias a las argucias diplomáticas del cónsul sueco, en un mano a mano dialéctico donde el cónsul tiene un puñado de cartas marcadas que juega con habilidad a sabiendas de que a su oponente no le queda otra para salir lo mejor parado posible ante la previsible derrota de su país.
Hay en la pieza del dramaturgo Cyril Gely algunos textos duros y autocríticos con su nación, evocadoras palabras sobre la ciudad de la luz, apelaciones a la masacre humana y algunas lineas que nos hacen dudar de a la postre quien engaña a quien. El resultado es que París y muchas de sus gentes siguieron en pie, cosa que no se puede decir de Dresde ni sus habitantes por citar un ejemplo. "La Florencia del Elba", fue arrasada sin piedad 6 meses después de los hechos de la película, cuando todo estaba ya decidido y no constituía un objetivo militar determinante. Ahí si que no hubo diplomacia que valga. Pero la historia la escriben los que ganan y afortunadamente y a pesar de los pesares ganaron los menos malos.
ELZIETE
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here
    arrow