Neeson protagoniza este controvertido biopic sobre la figura del "rebelde" irlandés Michael Collins; personaje polémico e intenso lider independentista que jugó un papel destacado durante los convulsos conflictos del siglo 20 entre el Reino Unido y la entonces ocupada Irlanda.

No es cierto que este biopic esté perfectamente acurado (sí, soy escéptica y decidí documentarme para comprobar que, en efecto, Jordan ofrece una visión algo distorsionada del conflicto (más en spoilers)). Durante la visión del film, Jordan consigue que empatizemos con los brutalmente reprimidos irlandeses... pero en otros momentos da la sensación de que intenta convencernos de una visón parcial que pretende hacer comprensibles ciertos actos sesgados.

Pero esto no es documental, sino una película... que resulta solo mínimamente cautivadora gracias a que parte de un conflicto interesante, vivido y enervante; unas actuaciones atrayentes y una percha bonita.

La película destaca por sus naturales actuaciones (exceptuando a Roberts que está algo desafortunada), Neeson se nos hace un Collins comprensible, espontaneo, franco, en parte querido y en parte incomprendido por la audiencia durante todo el metraje. Tal vez no llegue a colmar a su personaje del carisma y la garra demandadas... pero al menos es capaz de sostener el film con su campechana sencillez. Rea, Quinn, Hart y Rickman también se fusionan a la perfección con sus personajes.

El film también destaca por su elegante aspecto y forma. Goza de un buen acabado visual, con una exquisita cinematografía, buenos encuadres, una fotografía de solera, un interesante uso de filtros azules y una insuperable iluminación que visualmente ofrecen un retrato intimista a la par que fino y distinguido. Esto incluye también un adecuado vestuario y una banda sonora muy bonita.

Pero el ritmo del metraje no es el mejor, sino más bien de telefilm. El progreso del argumento es demasiado discontinuo, el metraje redunda excesivamente en algunos acontecimientos concretos de la lucha independentista que se hacen de lo más repetitivos, opta por aparcar la intriga política en favor de la acción de tiroteos, persecuciones y porrazos (que en este caso no es una acción de una brillantez magnetizante) y se alarga demasiado en algunos planos de las secuencias... todo esto la hace un poco plana y desapasionada, con algunos momentos incapaces de transmitir la intriga o la emotividad que pretenden transmitir. Para colmo el film intenta meter con calzador un triángulo amoroso entre Neeson, Roberts y Rea de lo más inverosimil, desapasionado, vacuo y ñoño; la química entre Neeson y Roberts es nula, y Roberts no resulta creíble nunca en su personaje. Esos momentos de romance son absolutamente desastrosos y entorpedean aun más la historia, todos ellos sobran.

Lo mejor: Alan Rickman como De Valera (aunque en versión original, al parecer no pega su acento inglés).
Lo peor: La historieta de amor con Julia Roberts. Sus momentos de rutina.

Entiendo el cachondeo general que hay con está película tan gris (merecería más bien haber sido un telefilm) por culpa de esas inclusiones de desnudos gratuítos tan aburridos y tan poco eróticos que aparecen en ella.

"Striptease" es una película mediocre y tonta (tirando a muy tonta) que hubiera quedado en el olvido de no ser porque en ella se incluye una carga supuestamente erótica y subidita de tono (que no lo es) que no hace sino dejar aun más en ridículo el intento de drama en sí.

Demi Moore hace de striper y madre soltera que trata de mantener la custodia de su hija mientras se ve envuelta en un enredo de lo más imbécil con un político asiduo al local de Striptease donde trabaja. El problema es que el desarrollo del enredo es absolutamente infantil y estúpido, y las actuaciones son huecas en su mayoría (de pena que las desconocidas secundarias strippers estén tan mal y aun así superen en expresividad y naturalidad a Demi Moore).

Todo resulta tan insustancial y flojo que aburre muchísimo en su lenta primera mitad... y en el último acto del metraje donde la cosa podría despertar algo de curiosidad por ser el desenlace, tenemos a Burt Reynolds haciendo de político corrupto en estado puro, un Burt Reynolds que debió de creerse que estaba en una comedia porque gracioso está un rato largo aunque esa no fuera la intención final de la cinta.

En fin: ¿Qué los políticos van a locales de striptease? ya lo sabíamos. ¿Que los trajeados de las despedidas de soltero también (y además siempre la lían)? también lo sabíamos. ¿Que siempre hay algunos habituales en esos locales enamorados de alguna churri y que siempre piden lo mismo? Claro.

Pero... ¿y todo esto no lo podían haber relatado con un poco de más seriedad, más pasión o emoción?... pues se ve que no. Aburrida al principio y chistosa sin quererlo al final (al menos no es aburrida todo el rato). Ni siquiera la sucesión de despelotes la hacen algo más dinámica (ya que resultan aun peores que los de "Ana y los 7"). Lo único que me sorprendió de la película es que vi como secundario a un joven Paul Gilfoyle (El policía de CSI) que tampoco encaja con seriedad en su rol.

"Striptease" me recordó a esos telefilms maluchos que ponen en las sobremesas de Antena 3 o Telecinco solo que con tetas... muchas tetas (normales o gigantes asiliconadas, a elección). Lo único rescatable es el "machote" de Ving Rames y la estupenda selección de canciones de los 80 y 90.

Lo mejor: La música y Ving Rhames.
Lo peor: Todo lo demás.

Esta cinta de Disney es, para mi gusto, la mejor adaptación sobre la historia del hombre-mono que se ha hecho (lógicamente, la estoy comparando con telefilms varios y la serie de los 60 entre otros). Y esto es porque los animales tienen aquí si cabe más sentimientos que los humanos (su animación lo transmite todo) y porque los animales hablan con su protagonista, haciendo su relación con este mucho más dinámica y empatizadora.

Genial tanto para niños como para adultos, sus primeros 30 minutos son una maravilla (y lo mejor de la cinta) con una serie de encadenamientos de "cortos" sobre la historia y situación que envuelven al personaje principal acompañados de unas increibles canciones de Phill Collins (sus mejores canciones están aquí) que se escuchan nada más comienza el metraje y, aunque el excesivo uso de las canciones en casi todo momento bien podría haber resultado una losa, la música encaja a la perfección y engrandece el film con letras y melodías que se hacen indispensables e inolvidables.

Como siempre, la cinta transmite bien la típica moralina Disney que esta vez habla de la aceptación, la superación, el aprendizaje y, finalmente, la toma de decisiones. Como todo gran clásico de Disney que se precie, "Tarzán" nos regala todo tipo de personajes muy bien perfilados: personajes entrañables (ese Tarzán bebé, esa mamá gorila) y personajes divertidos (esa carismática Terk y sus amigotes simios tan marchosos, ese elefante hipocondríaco). Y su guión, con una primera mitad cargada de un sentimentalismo entrañable y una segunda parte llena de humor, no aburre jamás. "Tarzán" nos obsequia con algún que otro momento enternecedor muy bien conseguido que despierta la lágrima fácil (sobre todo la relación que se forja entre la madre gorila y el hijo humano) y con otros momentos de humor divertido (a veces de carcajada). Además la ambientación de la jungla está bien lograda, tampoco es una maravilla pero sin duda nos ofrece lo que se espera de ella (incluso esas escenas de su protagonista surfeando la selva dan el resultado que buscan).

Lástima que se note un bajón en su segunda mitad y caiga como siempre en la previsibilidad y formalismo tan visto en sus últimos 20 minutos. Y que por supuesto es un muchos puntos un pelín "flipada", infantiloide e inverosimil (también es comprensible).

Pero con "Tarzán", Disney cerró una gran etapa en los noventa de nuevos y "grandes clásicos" animados, siendo este que nos ocupa el último que merece realmente la pena hasta la fecha de todos ellos.

Lo mejor: Su banda sonora que hace crecer la película. Su primera media hora.
Lo peor: Un puñado de momentos excesivamente cursilones. Su corrección, formalidad y previsibilidad del final.

Magnífica cinta animada de hora y cuarto basada en el sombrío e intrigante comic "Batman: Una muerte en la familia" y su agitada continuación "Bajo la capucha roja".

El relato se envuelve entorno a un ambiguo encapuchado que hace su aparición en Gotham chantajeando, matando y acorralando a la mafia y sorteando a un Batman que trata de averiguar su identidad (ya que el tal "capucha roja" le resulta muy familiar).

La cinta es el caramelo que cualquier fan de Batman desearía. Quienes admiramos la madurez y complejidad de los personajes de este universo, podemos observar como éstos mantienen toda su esencia aquí... pero sobre todo podemos observar como se conserva un tono lógbrego y afligido (donde el crimen infinito de la ciudad es un mostruo voraz que sobrepasa a estos superhéroes de forma agobiante, y la incorrupción moral es una cuerda floja por la que Batman siempre camina) y se mantiene el espíritu detectivesco que siempre ha caracterizado a estos comics (ese Batman detective fue lo que tanto eché de menos en "Batman: Guardián de Gotham"). "Capucha Roja" nos permite investigar con Batman un oscuro misterio muy interesante y muy bien relatado donde se entremezclan atrapantes y brillantes persecuciones y luchas animadas por la vertiginosa y enmarañada geografía de Gotham, potentes secuencias cargadas de momentos de compañerismo emotivo, drama intenso, injusta dureza y violencia (a veces no apta para niños con mucha sangre y craneos partidos) y tensiones morales considerables. Pero lo mejor es observar como todas esas excelentes piezas encajan (impecables flash-backs explicativos donde todo tiene su sentido) tejiendo una historia memorable para el universo Batman.

La mezcla de oscuridad con aventura detectivesca tan característica de Batman se mantiene, y aunque en cierto modo el misterio a resolver se va haciendo previsible según avanzan los minutos, el drama, los dilemas morales y el atractivo de sus personajes nunca desaparece.

El film nunca se despega de su atmósfera sombría, melancólica y adulta. Su grafismo es extraordinario tanto en la ciudad como en sus personajes (Black Mask resulta terrorífico... pero aun más el Joker con una animación inédita con multitud de fuertes rasgos espeluznantes y muy expresivos. La estética de Ala Nocturna es elegantísima y muy estilizada... pero lo cierto es que todos los personajes están muy bien diseñados y algunos detalles sangrientos y carniceros sorprenderán a más de uno). La banda sonora es digna de cualquier largometraje de Batman de carne y hueso, totalmente pertinente, mezcla compases de suspense y tinieblas con otros épicos. Pero lo que más destaca es la combinación de un guión con grandes diálogos y situaciones palpitantes e impresionantes, y de un ritmo medrado y a ratos más trepidante incluso que el de "El Caballero Oscuro".

Hay que agradecer a este producto que mezcle tan bien todo que ofrezca una construcción de personajes totalmente digna con su universo...

"Solo en casa" contó con un presupuesto de 18 millones, no tuvo una excesiva promoción y sin embargo recaudó casi 500 millones de dólares y dió pie a varias secuelas. Y su exito no fue casual o inmerecido, porque "Solo en Casa" es una buena película.

Y es que no estamos hablando de la típica película de "niño hace tontas trastadas" solo tolerable para un público aniñado, estamos hablando de una cinta de aventuras infantiles conducida de la mano de Chris Columbus que es un experto en estos menesteres. El responsable de las dos primeras y maravillosas entregas de "Harry Potter" ya demostró en su segundo largometraje una gran desenvoltura en la realización. Correcto siempre, el director nos deja apreciar las carismáticas actuaciones (genial el personaje de Joe Pesci y su diente de oro, o Daniel Stern con sus agudos gritos, o Catherine O'hara como madre agobiada) y la excelente ambientación de ese navideño barrio de Chicago envuelto en nieve, luces hermosas y algo de oscuridad (sí, la ambientación de "Solo en casa" resulta bastante única sorprendentemente). Nos deja recrearnos con la mágica banda sonora de John Williams (que por cierto, es de sus mejores obras) con villancico ensoñador por aquí y campanillas por allá... su música es el punto fuerte de la película y ningunear la cinta es ningunear al maestro Williams que te mete en un mundo nuevo solo con sus melodías.

Columbus nos ofrece una navidad mágica, cálida, cercana y evasiva (si te gustaron las dos primeras cintas de Harry Potter y las siguientes te decepcionaron pensado que les faltaba "algo", ese "algo" es la magia de la combinación Columbus-Williams y la encontrarás de nuevo en productos tan solventes, agradables y entretenidos como sus "Solo en casa 1 y 2").

Es una de esas cintas familiares navideñas, evasivas y clásicas... de las buenas, principalmente dirigida a los niños, pero que no es raro que la disfrute más de un adulto e incluso se emocione y se ría con ella (yo la he visto más de 10 veces y todavía me río con sus gracias). Tiene situaciones realmente ingeniosas e inolvidables, momentos sentimentaloides y la típica moralina de apreciar lo que se tiene gracias al espíritu navideño. El guión está muy bien elaborado con un correcto desarollo de la trama y las actuaciones están muy bien por lo general.

Admito que tiene sus momentos tontos, pero a nivel global deja muy buenas sensaciones. Muy recomendable si se es peque y si se es un amante de la comedia familiar, las fábulas navideñas, y si se idolatra a John Williams o a Joe Pesci.

En fin, la cinta tiene una magia especial y, tras oir sus primeros acordes, transporta instantaneamente a la postal navideña de la casa de los Mcalister. Las vergonzosas "Solo en Casa 3 y Solo en Casa 4" están a años luz.

Lo peor: Tiene algunos momentos tontos. Algunas acciones del crío demasiado poco creíbles.
Lo mejor: La banda sonora de John Williams...