Se prefirió la sangre que un buen guión, se prefirió el aspecto desarreglado de Hellboy que plantear una historia que no les exigiera tanto en las locaciones, prefirieron una y otra vez resaltar la actitud inadaptada del personaje contra el mundo (de la manera más molesta posible) en vez de explorar mejor lo que podían contar de otros personajes.

Así se podría continuar hasta llegar al punto de pensar cómo es que sabiendo que el mercado de adaptaciones cinematográficas sobre cómics está en su punto más alto, quisieron competir con algo que no podían ganar y aun así no importarles perder al final.

El film es una experiencia salvaje que no se olvidará fácilmente. La música, los movimientos de cámara o los colores te llevarán por el existencialismo y si te fundes lo suficiente con la historia, probablemente el desenlace será lo más alentador. No es una película para todo el mundo, pero tiene consistencia y manejo técnico excepcional para la propuesta en general.

La gran cantidad de mejoras se enfocan en Bumblebee, lo que en realidad toma un giro decepcionante al final, porque el guion sigue siendo un tramo descuidado y que continúan omitiendo. Las relaciones, entre los personajes se desarrollan de forma apresurada, haciendo que resalten aun más la baja calidad del guion.

Si la idea de I Still See You era ser un thriller de terror/ciencia ficción que se vuelve fatalmente complicado, por supuesto que lo lograron y de la peor manera. En última instancia, llega a ser más que decepcionante todas las posibles subtramas que se podrían haber abarcado pero que simplemente ni el director, ni los guionistas o los productores decidieron asumir.