NO, cine negro PARA adolescentes. Madre mía, ver esto de un tirón es toda una hazaña. Después de varios intentos por fin fuimos capaces de verla entera... un híbrido de "humor", "misterio" y "cine negro". Pero Brick es mala de solemnidad en todos los aspectos. Aburrida, lenta, soporífera, pretenciosa, liosa, y con una protagonista, femme fatale, con menos carisma que Katie Holmes. Cada día entiendo menos las críticas y los gustos. Entre Brick y un capítulo de Hospital Central, que era la otra opción un Miércoles por la noche, no hay mucha diferencia.

Es prácticamente imposible describir las sensaciones que causa ver algo tan rematadamente malo como la primera media hora de esta persecución extrema (tiempo máximo que aguanté viéndola). No es del tipo "tan mala que hace gracia", no. Es mala a secas, que es muchísimo peor. No hay acción, tan sólo escenas inconexas de explosiones y disparos. el escenario es peor que el de cualquier telefilm de sobremesa, la chica es un clon de Mari Cielo Pajares, la música..., las bromas son de traca, los guionistas ya ni se esfuerzan un mínimo por parecer graciosos (lo del "azúcar" produce sonrojo).

lo más destacable: el guiño a Terminator
lo peor: todo lo demás...hay películas que intentan tomar por tontos a los espectadores

Lo de esta película ya es pasarse. Menkes y Albacete llegan tarde (las escenas de sexo, las drogas...ya está tan manido...). No hay historia, ni cohesión, ni emoción, no hay nada, sólo escenas aburridas enlazadas al tuntún que no impactan a nadie ni remueven nada (si tienes menos de catorce años a lo mejor) y una sarta de topicos, clichés, desgarros adolescentes, personajes rancios, anormales, degradantes, imbéciles, y tonterías varias.

No, no y no. Es difícil imaginar una película donde la interpretación de Adriana Ozores no sea sobresaliente (y en este caso lo es), pero la interpretación de Javier Pereira como heroinómano es tan poco creíble, sobreactuada y lechugina que eclipsa el resto de cosas buenas que tiene Heroína, incluída Adriana. Un yonqui no es así.

Torpe, aburrida, rococó e incapaz de producir el más mínimo cosquilleo, Eden Log posee una estética y un nivel de hastío similar a otra reciente peli francesa cuyo título no recuerdo. De realización odiosamente mareante, (es lo que tiene que algunos realizadores entiendan de esta manera tan tonta la modernidad) ni siquiera es válida como curiosidad o rareza. Un quiero y no puedo de ejemplar mediocridad, con un protagonista cargante e inexpresivo y algunas escenas (premio a la de sexo, el broche final y la prueba definitiva del algodón) absurdas y ridículas. No es, como se pretende, obsesiva ni enfermiza, es una nadería idiota y sin ningún sentido. Una soberana pamplina. Lo peor de todo es que algunos se lo han creído (no es americana, no está Liv Tyler, posee una apañada fotografía y una estética de videoclip modernoide) y al final consigue la misma puntuación que The Strangers. Paradojas de la vida.