Haz click aquí para copiar la URL
You must be a loged user to know your affinity with Cole Thornton
Críticas 30
Críticas ordenadas por utilidad
Críticas ordenadas por utilidad
3
6 de octubre de 2022 4 de 5 usuarios han encontrado esta crítica útil
¿Sabéis cuando en un culebrón colombiano uno de los personajes dice una "frase lapidaria", la imagen cambia de plano (normalmente un primer plano de quien habla o de quien recibe el zasca), suena un "¡chan, chan!" y le sigue un silencio de de cinco segundos? Pues esta película suma frase lapidaria tras frase lapidaria, cada cual más pretenciosa, cada cual más impersonal, cada cual más ridícula, cada cual más artificiosa.

Claro que el maestro Vidor no intenta esos efectismos visuales. Lo hace todo mucho más teatral, estudiando cada encuadre, planificando la posición de cada personaje en cada escena y apoyado en una fotografía soberbia.

Además, el argumento roza lo ridículo al tomar un tema tan rebuscado, la arquitectura, como elemento que capaz de mover las opiniones públicas y hasta generar disturbios.

Que sí, que el alegato de la individualidad frente al aborregamiento está muy bien. Que de paso desliza una crítica anticomunista en los primeros años de la guerra fría...

Pero está bien que una película plantee problemas filosóficos e, incluso, que se posicione respecto a los mismos. Pero si te pasas metiendo sentencias filosóficas cada 2 minutos, si los personajes enlazan diálogos inverosímiles como si se hubiesen metido una sobredosis de "soy más duro y más frío que tú", si los personajes hablan como robots... Todo naufraga irremediablemente.
16 de septiembre de 2014 3 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
La historia de niño/a rico/a que, por azares del destino, se despojado/a de sus fortuna y privilegios, situación que la hace sacar lo mejor de si mismo/a, ya la hemos visto mas veces, en ocasiones magistralmente contada (Capitanes intrépidos, dirugida un par de años antes por Victor Fléming).

La historia resulta entrañable, con más carga dramática de la que cabía esperar en un principio al tratarse de una película dirigida al público infantil. Walter Lang hace un excelente retrato de los personajes y la historia mantiene casi siempre el interés del espectador. En este sentido, lo peor, el sueño de la pequeña Sara, fragmento introducido con calzador para el lucimiento de Shirley Temple.

El mayor déficit, en mi opinión, está producido por los saltos en el hilo narrativo, insertando escenas que, si bien dan sentido a la historia y a los personajes, aparecen "abruptamente", salpicadas por aquí y por allá y sin hilo conductor que aporte "ritmo" a estos saltos.

Es curioso porque, por otro lado, la película introduce escenas muy bien llevadas que sorprenden agradablemente al espectador, como la aparición de la reina Victoria o el comandante que permite al soldado raso aparentar su propio rango (comandante).

En definitiva, una bonita historia, con buena dirección de actores y excelente retrato de personajes pero que cojea en el hilado de bastantes escena.
8 de enero de 2023
8 de 14 usuarios han encontrado esta crítica útil
La película es un bodrio para el lucimiento de un Tom Cruise de 60 años aparentando 48. Tal vez por eso, el sexagenario Tom prácticamente muestra sólo tres caras:

- La mitad de la peli se la pasa con una cara de chulo-simpático que sonríe todo el rato como diciendo “sé que soy irresistible pero en estos momentos te voy a dar una oportunidad para comunicar contigo como si fuese normal”. A esta cara le acompañan siempre frases “ingeniosas” que demuestran que es más chulo y más listo que todos los que le rodean. Es patético porque conserva la sonrisa incluso cuando lo echan a empujones de un bar.

- Luego se pasa un buen rato de la peli llorando, para que veamos que detrás de ese chulo simpático se esconde una persona sensible.

- Por última, está la cara de duro instructor de vuelo que se pone borde porque los alumnos (todos pilotos de élite) no son aún conscientes de lo arriesgado de la misión para la que los han elegido. ¡De traca!

Luego están los pilotos jóvenes (como ya he dicho todos ya soldados curtidos de élite) que intentan ser tan chulos como Tom, pero el sexagenario les gana siempre como si de una pelea de gallos se tratase. El abuso por parte del guionista de esa chulería les hace que parezcan más adolescentes de instituto que soldados.

Y luego están las “piruetas argumentales”. Como siempre en las pelis de guerra americanas, tiene una excusa para atacar un país enemigo. Ya ni se molestan en decir qué país es (me imagino que para no molestar a nadie). Los cazas enemigos no son MIG o Sukhoi rusos, sino que son simplemente "cazas de 5ª generación" (me imagino que para no molestar a Putin).

Y que parece de niños parvulitos es el pretexto para usar F-18 en lugar de F-35 (mucho más modernos): tienen que operar en una zona donde no funciona el GPS de los F-35. Como si no pudiesen volar unos minutos sin GPS (parece que son como conductores del siglo XXI, que sin GPS no saben buscar una dirección a la que no han ido nunca). Supongo que la Marina de los EEUU no les dejaba más que un F-35 o que es más fácil rodar las escenas de lucha con los F-18 que van más despacio.

Eso sí, las escenas de combate de los cazas (ya sea en entrenamiento ya sea en la misión) espectaculares. Por eso le doy un 3 en lugar de un 1.
21 de abril de 2020 3 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
Magnífica cinta de Ford que aborda las penurias de una familia americana en los peores años de la depresión. El film aporta una visión muy cruda de los sectores más golpeados por la crisis de los años 30,

Los protagonistas, los personajes que les rodean, los paisajes... Todo suma para conseguir un ambiente de angustia e impotencia. El rimo narrativo y la fotografía, con muchas escenas nocturnas con fuerte contraste, ayudan a ver a los personajes como víctimas de un sistema implacable y que no logran entender.

El tema es que esa misma cinta se podría repetir hoy con los inmigrantes ilegales centroamericanos que trabajan en condiciones deplorables en EEUU o con inmigrantes marroquíes, rumanos o subsajarianos que recorren España adaptándose a la recolección de fruta y hortaliza según toque por zona geográfica y época del año. Los empresarios del sector dicen que los españoles no quieren trabajar de temporeros, que es muy duro y que lo dejan al segundo día. Lo que no dicen tan claro es las miserias que pagan que sólo compensan a personas desesperadas, que llevan su hogar consigo, como los personajes de la película.

Pero claro, en "Las uvas de la ira" los protagonistas (y el decorado de personajes que acompañan) son WASP, blancos anglo-sajones y protestantes. Así es más fácil generar la simpatía del espectador norteamericano y europeo, y es posible encajar frases esperanzadoras y rimbombantes como "No pueden acabar con nosotros, ni aplastarnos. Saldremos siempre adelante porque somos el pueblo".
19 de febrero de 2021 2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
Tras ver 1917 tengo la sensación agridulce de haber visto una partida en un estupendo videojuego de la I Guerra Mundial.

La decisión de, en un alarde técnico, rodarla como un único plano secuencia de 2 horas ayuda a esta sensación, pero sobre todo el hecho de que la cámara acompañe continuamente al protagonista, con predominio de los planos subjetivos. Esto consigue un efecto inmersivo muy potente, y el espectador siente que acompaña al protagonista durante todo el metraje, como en un videojuego.

La espectacularidad de los escenarios, las bombas cayendo, los tiros pasando cerca, el agobio de las trincheras... Todo ello enancha y empuja al espectador a través de la cinta, como en un videojuego.

En los videojuegos se van superando pantallas. La película imita esta dinámica y ahí es donde naufraga. Cada "pantalla" de la película es muy distinta a la anterior, cambiando el decorado, la iluminación, hasta el ritmo... como en los videojuegos.

Pero, como en los videojuegos, una vez pasada la pantalla, parece que lo anterior no existe, queda olvidado, aunque acabe de pasar y esté sólo a unos pocos metros. Y 1917 replica esta dinámica y, a veces, cuando el protagonista pasa de pantalla, el espectador se pregunta "¿como es que no... (no quiero hacer spoiler)?"

Y cómo en los videojuegos, los personajes son bastante planos. Apenas evolucionan. Nos identificamos con ellos sólo por la tensión de ir salvando las dificultades. Porque hay un enemigo. No importa (o no consigue Mendes que nos importe) cómo son los personajes. Sólo importa la misión. Sólo importa ir superando pantallas para llegar al final... como en un videojuego.
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here
    arrow
    Bienvenido al nuevo buscador de FA: permite buscar incluso con errores ortográficos
    hacer búsquedas múltiples (Ej: De Niro Pacino) y búsquedas coloquiales (Ej: Spiderman de Tom Holland)
    Se muestran resultados para
    Sin resultados para